Solo por el simple hecho de que Ryan Villopoto vaya a Europa para correr en el Mundial de MX, suma unas nuevas cotas de expectación jamás vividas en la historia de este campeonato. Además, si tenemos en cuenta que 2015 será, según el propio californiano, su última temporada como piloto profesional, aumentará aún más el interés por esta especialidad.
Todo parece indicar que Villopoto se dejará el alma para acabar su carrera deportiva con uno de los más grandes de la historia de la disciplina, ya que desde la creación del Campeonato del Mundo de MX, en 1957, ningún piloto de esta especialidad ha conquistado tanto el título Mundial FIM como el Campeonato AMA de SX.
Por si fuera poco, desde los albores de la década de los 80 ningún campeón de Supercross ha abandonado su propio hábitat para cruzar el charco en busca del título de campeón del mundo. Una incursión en el que deberá vérselas con el número uno, Tony Cairoli. Sin lugar a dudas, Ryan Villopoto deberá hacer mucho más que venir aquí y correr para salir por la puerta grande…
Ha sido difícil, pero al final estarás en el Campeonato del Mundo. ¿Qué es lo que te ha motivado para cambiar de aires?«Lo cierto es que no ha sido nada en particular. Más bien ha sido un cúmulo de cosas que me han resultado atractivas. Cada vez que viajábamos a Europa para disputar el Motocross de las Naciones me sorprendía lo distinto que es todo aquí. Recorrer el viejo continente, visitar sus distintos países y conocer a sus gentes y distintas culturas era algo que me motivaba sobremanera. Y no solo a mí, sino también a mis principales patrocinadores».
¿Cuándo empezó a cuajar la idea?
«Si no me equivoco fue en Alemania, durante el MXGP de Teutschenthal. Primero hablamos con Kawasaki sobre correr el Mundial de MX, pese a que al principio dudábamos sobre qué opinarían, y luego lo comentamos con Monster, nuestro principal patrocinador y también el del Mundial de MX. La propuesta fue muy bien acogida, pero hubo que remover cielo y tierra para ir al Mundial con las máximas garantías posibles. Además, no pudimos anunciar el cambio hasta que mi contrato con Kawasaki EE.UU no hubiera concluido. No negaré que estoy algo nervioso, aunque con las ilusiones renovadas…».
Antes de anunciar que te ibas al Mundial, se rumoreaba que te ibas a retirar…
«Conozco un montón de gente que estaba especulando sobre mi retirada y, para ser honesto, lo consideré. La vida de un piloto de motocross profesional puede ser muy difícil, especialmente si sufres más lesiones de lo habitual. Salgo de tres operaciones de rodilla y de una dura recuperación que no se la deseo a nadie. Un largo periodo de incertidumbre que me ha costado el quinto título consecutivo de SX y no sabía si quería hacer frente a todo eso, una vez más. Hubo quien incluso me preguntaba si podría volver a ser el mismo, recuperar mi nivel y si podría asumir este nuevo reto. Pero al final, el hecho de liar los bártulos ha sido vital para que todo ello no diera tantas vueltas por mi cabeza».
Durante estas semanas has ido reconociendo el terreno, ¿no?
«Sí. Fuimos a mediados de octubre a Bruselas para conocer el equipo. Allí vi las instalaciones y el taller de competición del Monster Energy Kawasaki Racing Team y conocí a la mayoría de los miembros del equipo. Nuestro centro de operaciones será Holanda y estaré muy cerca de donde vive mi amigo y futuro compañero de equipo, Tyla Rattray. Ambos viviremos a las afueras de Lommel, aunque también hemos hecho varias incursiones en Francia, siendo el circuito de Saint Jean d’Angely donde hemos realizado varios test».
Desde un punto de vista técnico, ¿vas a tener la misma moto que en Estados Unidos?
«Está claro que debido a los reglamentos técnicos que habitan en ambos campeonatos era imposible tener exactamente la misma Kawasaki con la que corría en Estados Unidos, pero sé que dispondré de todo el material que necesite. Llevo seis años como piloto oficial de la marca y sé que Kawasaki es una firma que se volcará en mí al 100 por cien y eso es todo lo que necesitó saber al respecto».
¿Supongo que tu objetivo como el de Kawasaki es el título mundial?
«Sí. Sería alucinante conseguir la primera victoria estadounidense en el primer año en el Mundial. Sé que no va a ser coser y cantar. Intentaré aprender lo más rápido posible sobre este campeonato y, para ello, contaré con el apoyo de mi equipo y de Tyla Rattray, ya que su experiencia en el terreno será esencial para lograr nuestros propósitos. Lo que tengo muy claro es que pase lo que pase, tanto si gano el Mundial como si no, me retiraré el próximo año. Va a ser duro y por ello voy a dar lo mejor de mí para ganar».
Desde que anunciaste tu llegada, todos te hemos comparado con Tony Cairoli. ¿Va a ser tu piloto a batir?
«Evidentemente, Cairoli va a ser el hombre a batir. Es el campeón del mundo, es uno de los mejores pilotos de allí y habrá que seguirlo de cerca. Sin embargo, veo al italiano como a otro rival cualquiera. No nos podemos comparar sobre quién de los dos es mejor. Hasta ahora, la única vez que podemos enfrentarnos ha sido el MXdN, pero no deja de ser un fin de semana y no se puede llegar a una conclusión con tan solo un resultado. Pienso que habrá circuitos que se me den mejor a mí que a él y viceversa».