El equipo KH-7 y Laia Sanz han presentado en Barcelona su nuevo proyecto para el Dakar 2014. La piloto de Corbera del Llobregat disputará otro año más el raid más duro del mundo y lo hará al manillar de una Honda HRC bajo el patrocinio de la marca KH-7. La pluricampeona se ha fijado acabar entre los 25 primeros de la general de motos y ser la primera mujer clasificada.
Laia Sanz afronta el Dakar 2014 después de otro año histórico, en el que ha conquistado su 13º título mundial de trial, el segundo de enduro y tres medallas de oro en los X Games de enduro extremo.
Llegará en plena forma al Dakar 2014 y con el deseo de quitarse la espina de la anterior edición, en la que los problemas mecánicos estuvieron a punto de obligarla a abandonar. Cuando luchaba por acabar entre los 30 primeros de la general en motos y tras haber protagonizado grandes actuaciones que le permitieron ser 12ª en la octava etapa, Laia tuvo que ser remolcada por su mochilero durante más de 400 kilómetros en una jornada épica que jamás olvidará.
“Nunca antes había tenido una moto tan competitiva en el Dakar. Es cierto que el piloto hace mucho, pero es básico contar con una buena moto. Me siento afortunada por afrontar este raid con una máquina así y con el apoyo de KH-7, sin el que nada de esto sería posible. Espero sacar el máximo rendimiento y devolver al equipo la confianza que ha depositado en mí”, ha asegurado Laia Sanz.
Sobre esta montura tratará de conseguir unos objetivos muy ambiciosos: “En los primeros días del último Dakar fui mejor de lo que esperaba, lo que me sirvió para coger confianza y demostrarme a mí misma que soy capaz de hacer un buen papel. Esta vez el objetivo es, sobre todo, acabar, tarea que no será nada fácil. Más que hacer un buen resultado puntual en una etapa, lo que me importa es la general y me marco el reto de luchar con los hombres para clasificarme al final entre los 25 o 30 primeros”.
Laia Sanz tratará de superar una edición del Dakar que se prevé más dura que otros años, al contar con 9.000 kilómetros por Argentina, Bolivia y Chile, 5.000 de los cuales serán cronometrados. “La organización ha preparado etapas más largas y duras que en otras ediciones. Durante cinco jornadas nos separarán de los coches, por lo que sospecho que a las motos nos harán pasar por sitios muy técnicos y complicados. Seguro que será un Dakar muy selectivo, que me obligará a estar muy atenta y concentrada desde el primer día”, esas fueron las declaraciones de la piloto analizando lo que le depara la nueva aventura con nueva moto en el raid más exigente del planeta.