Lo anunciaron este fin de semana justo antes de que comenzaran las carreras. Finlandia volverá al calendario oficial de MotoGP a partir de 2018. Dorna trabaja incansable en los últimos tiempos para aumentar su audiencia y lograr que el calendario sea tan internacional como sea posible. A la incorporación del territorio escandinavo habría que sumar otros destinos en Asia como pueden ser Tailandia, Indonesia (que no llega para 2017) o Kazajistán. Y es que mientras el mercado europeo sólo está despertando del golpe de la crisis económica, fuera del viejo continente se levantan auténticos gigantes de las dos ruedas. En Indonesia, para hacernos una idea, el 82,4% de los vehículos registrados son motos llegando casi a los 80 millones de motos.
Puede que muchas de ellas sean propiedad de gente que ni ha visto ni quiere ver una carrera de MotoGP, pero el potencial existe y, de hecho, ayudará a crear un campeonato sostenible a largo plazo.
Pero volviendo sobre el frío país escandinavo, se trataría de retomar el camino que terminó en 1982 gracias a la construcción de un nuevo circuito de velocidad, el KymiRacing. Un trazado de 4,8 km de longitud diseñado por Pohjola Racing en 2009 pero que ha sufrido varias modificaciones por parte de Apex para cumplir con las normativas de la FIA, FIM, reducir costes, mejorar explotación comercial etc… Está situado cerca Iitti, a unos 150 km al noreste de la capital, Helsinki.
El Gran Premio de Finlandia en el pasado
Como decíamos, se trata de recuperar un mercado prácticamente perdido: el del norte de Europa. Durante 20 años en los que Giacomo Agostini acumuló un total de 17 victorias tuvimos Gran Premio de Finlandia, primero en Tampere y después en el famoso circuito de Imatra. El de Tampere se trataba de un trazado urbano cercano a la torre de observación de Pyynikki, mientras que el de Imatra lo recordaréis muchos por incluir el cruce ferroviario en una de sus rectas.
Bien se acordará también Ángel Nieto, que atesora cuatro victorias entre las categorías de 50cc (una) y 125cc (tres), ya en los últimos años del GP.
Se cayó del calendario de GP500 por unas pésimas medidas de seguridad. En Imatra hubo que lamentar la muerte de dos pilotos británicos, Vernon Cottle en 1964 y Jock Taylor en 1982, último año del GP. Bordillos, árboles… y elementos que no eran propios de la época y profesionalización del sector hacían imposible su continuación.