Stefan Bradl tiene un palmarés que no está nada mal. Campeón de España de 125 cc (2007) y campeón del mundo de Moto2 con una Kalex en la temporada 2011 después de conseguir cuatro victorias. Al año siguiente el simpático alemán dio el salto a MotoGP y, a pesar de contar con material Honda, no consiguió nunca mezclarse con el primer grupo. En los tres últimos años en la categoría reina ha terminado octavo, séptimo y noveno.
Honda esperaba más de Bradl, quien ahora comienza una etapa completamente nueva con el equipo Forward-Yamaha.
¿Eres optimista de cara a la temporada 2015?
El test de Jerez fue muy importante, fue solo un día pero rodé a buen ritmo. Sirvió para empezar a conocer al equipo y la moto, así que me fui tranquilo antes del parón del invierno.
¿Qué tal con tu nuevo equipo?
Muy bien, incluso hay dos miembros que son alemanes. Al final es como cuando te cambias de trabajo, lo primero es conocer a la gente. Hemos trabajado durante varios días juntos aunque seguro que todavía queda para que estemos compenetrados. He visto que la escuadra funciona de manera profesional y hay un ambiente positivo. Todo está como debería.
¿Te daba problemas la moto con el material Kayaba? ¿Con Öhlins tenías otras sensaciones?
Desde el principio me decanté por Öhlins, pues Kayaba había estado 13 años alejada de MotoGP. El tacto no es al que yo estoy acostumbrado, es como si no tuviese la rigidez suficiente. En mi carrera deportiva siempre he utilizado Öhlins y sé que el material es bueno. Además, los demás también llevan el mismo producto. Me alegro de haber despejado esa variable y tenerlo claro desde el principio.
¿Crees que darás más de una sorpresa con la Forward-Yamaha?
Tengo confianza en mí mismo, aunque primero tenemos que ver si han cambiado algunas cosas este año. Las Honda-Open seguro que serán más competitivas, llega Aprilia, Suzuki aterriza una vez más, Ducati estará fuerte… No sabemos todavía qué es lo que ocurrirá en la temporada 2015. Tengo confianza, creo que estaremos preparados para darle a más de uno una sorpresa. La vara de medir será lo que consiguió el equipo la pasada temporada, lo que al menos se deberá igualar. Aleix Espargaró finalizó séptimo en el Mundial. Esto deberá ser nuestra referencia.
¿Cómo valoras tu paso por el equipo LCR? ¿Echas algo de menos de aquella época?
Me ha costado mucho decir adiós a aquella gente pues han sido, y son, un gran equipo. Me han acompañado durante tres años de mi carrera deportiva y la relación entre nosotros no ha dejado de crecer. Se trata de un equipo pequeño, familiar, con muy buen ambiente. Me entendí de maravilla con todos, pero ya he digerido el cambio. Ahora tengo la cabeza en mi nuevo equipo. El año pasado ya se fue, es hora de ir a por el nuevo reto.
¿Cómo te mantienes en forma durante el invierno?
Practico motocross para no perder el tacto con la moto. Da casi igual hacer supermotard o motocross, no hay gran diferencia. Nunca me ha costado después del parón invernal volverme a subir a la moto y empezar a dar vueltas en Sepang. Me han quitado dos tornillos del tobillo que me habían puesto el año pasado después de tener un pequeño accidente en Malasia. Fue una operación poco intrusiva y la misma noche ya estaba en casa. Enseguida me recuperé y no ha habido ninguna complicación. Ahora estoy concentrado en estar lo más en forma posible. A lo mejor hago algo con Sandro Cortese, siempre estamos en contacto y a la espera de apuntarnos a lo que surja.
¿No será lo mismo ir ahora con el software de Dorna que con el que tenías en tu Honda?
La diferencia se nota con claridad. Creo que el software del campeonato es más complicado. Por fortuna tengo dos grandes técnicos en este apartado, aunque nos llevará tiempo tener todo el sistema por la mano y saber reaccionar de forma adecuada cuando surjan dificultades. En los entrenamientos invernales trabajamos mucho con la electrónica y sacamos unas cuantas conclusiones.
Una vez que entiendes el software y sabes cómo funciona creo que el resultado es parecido al que tenía en la Honda. Lo único es que me parece más complicado a la hora de estar cambiando cosas en él. El software de Honda pienso que es algo más preciso y ofrece más posibilidades, pero esto a veces te lleva a perderte, algo que nos ocurrió en multitud de ocasiones. Así que el software de Magneti-Marello no debe suponer una desventaja.
¿En qué trabajarás con tu moto en los test de Sepang?
Ya he probado dos chasis, una versión 2013 y otra 2014. Realmente se nota la diferencia. Aunque todavía mi objetivo principal es conocer la moto. Lo primer es encontrar una puesta a punto de la moto que funcione para mí. Allí podremos probar piezas diferentes pues seguro que para Malasia llegarán algunas mejoras.
¿Crees que vas a tener que cambiar tu estilo para sacarle todo el partido a la Yamaha?
La Yamaha tiene más agarre cuando está tumbado a tope. Es muy importante abrir gas pronto y luego mantener el paso por curva. Todavía tengo el estilo propio de llevar una Honda, entrar tarde, poco tiempo muy inclinado y apuntar a la salida. Con la Yamaha es importante no frenar muy tarde, soltar los frenos pronto y mantener el paso por curva