KTM Super Duke: evolución de la maxinaked

Hasta la aparición de la KTM 1290 Super Duke R SE hemos disfrutado de unos cuantos modelos que repasamos en este artículo.

Sergio Romero. Fotos: Jaime de Diego

KTM Super Duke: evolución de la maxinaked
KTM Super Duke: evolución de la maxinaked

La KTM 1290 Super Duke R SE es la más especial de todas las motos de carretera que KTM tiene en su catálogo, nacida para disfrutar de una conducción deportiva y la más avanzada en cuanto a la electrónica se refiere, como pudimos comprobar en la prueba que realizamos con ella en carretera y en circuito. Se trata de la última versión de las KTM Super Duke, un modelo que ya cuenta con una historia que repasamos a continucación.

KTM 990 Super Duke (2005)

La KTM 990 Super Duke nace como un prototipo en 2003 y dos años después se lleva a la calle con el motor bicilíndrico LC8 subido de cilindrada. Destaca por su carrocería angulosa y por su concepto diferente. Se une a la creciente corriente de las streetfighter.

KTM 990 Super Duke R (2007)

La llegada de la versión R radicaliza el modelo, con la decoración habitual de guerra, horquilla WP de 48 mm, una geometría más cerrada, asiento monoplaza y motor más potente, que ya declara 132 CV. En 2012 se unieron las dos versiones en una sola.

KTM 1290 Super Duke R (2014)

Hace dos temporadas llegó la KTM 1290 Super Duke R con el mismo concepto, pero llevándolo mucho más allá, gracias a un motor muy potente con más cilindrada y una parte ciclo totalmente nueva. La estética y la gestión electrónica se pusieron a la altura de las mejores del momento.

Funcionamiento de la KTM 1290 Super Duke R

En la ciudad la KTM 1290 Super Duke R intimida por su aspecto y cifras, pero es dócil, especialmente si utilizamos el modo de conducción Street. Tan solo hay que mantener el motor por encima de 3.000 rpm. Parece una moto radical, especialmente en la versión especial, pero no es nada incómoda y resulta suave en marcha a la hora de salir de ruta. Ahora bien, le falta capacidad de carga y algo de protección para hacer turismo. Donde mejor se encuentra es a la hora de llevar una conducción deportiva. Con un motor de sus características, las ayudas electrónicas y una parte ciclo «ready to race» no hace falta decir lo divertida que es, sobre todo la versión SE, en carreteras de curvas o en circuito. En cuanto al pasajero, éte tiene un puesto bastante elevado y con poco espacio, tampoco dispone de asas, de modo que queda un poco expuesto. La línea prima sobre la comodidad en este punto.