BMW R nineT. Prueba

La R nineT ya está entre nosotros y la hemos podido probar. Se trata de una moto sencilla de planteamientos y con una estética muy cuidada, pero su lado deportivo sorprende

Victor Gancedo

BMW R nineT. Prueba
BMW R nineT. Prueba

No todos los días se cumplen noventa años y BMW lo ha querido celebrar de una forma muy especial, creando un modelo conmemorativo con una denominación que hace alusión a la dilatada historia del fabricante alemán y que también rememora a una de sus motos más míticas: la R90 que se fabricó entre 1973 y 1976.  Es de sobra conocido que la marca de la hélice ha estado muy ligada al motor bóxer desde sus inicios en 1914. Por tanto, los encargados del desarrollo de la R nineT tenían claro que no podía utilizar otro tipo de configuración mecánica.

Además, no monta el último y moderno bóxer de cárter único dotado con refrigeración líquida, sino que para propulsarla se ha optado por el bóxer de la generación anterior, refrigerado por aire (y aceite) y con la caja de cambios situada en un cárter trasero independiente, separado del principal por un embrague monodisco en seco, una «arquitectura» indudablemente más clásica. Aunque ha recibido varias evoluciones, BMW lleva fabricando este motor desde 1994 y, por tanto, es un elemento muy pulido y perfeccionado. Además, para su último cometido ha recibido unos últimos retoques, demostrándonos que su funcionamiento está muy logrado y que con 110 CV declarados es capaz de mover con mucha alegría los 222 kg que se anuncian en orden de marcha para esta nueva moto

Llamativa

Al observar la R nineT, aparte de su indiscutible atractivo, hay una cosa que llama mucho la atención. En su tren delantero no incluye el sistema Telelever que incorporan todas las bóxer alemanas desde aquel 1994. Se ha optado por montar una robusta y aparente horquilla invertida con barras de 46 mm, lo que ha obligado a crear un chasis tubular totalmente nuevo que en su parte delantera recuerda a los que fabrica una afamada marca italiana. Respecto a la horquilla, BMW ha mencionado que un sistema de suspensión así tiene más posibilidades y facilita la labor de los preparadores. Además, le otorga al modelo un carácter más especial y diferenciador con respecto al resto de modelos de la gama bóxer. Con este tren anterior, igualmente queda claro que la nueva «R90» tiene unos planteamientos deportivos innegables a pesar de ser una moto desnuda dotada de un manillar alto y, por cierto, muy ancho.

Precisamente las primeras sensaciones que transmite al arrancarla y recorrer los primeros metros están marcadas por el ligero balanceo lateral que provoca el giro del cigüeñal longitudinal y por el hundimiento que se produce en el tren delantero al realizar las primeras frenadas. Recordar que el nuevo bóxer «de agua» tiene ejes contrarrotantes que equilibran su funcionamiento y consiguen que las BMW que lo montan se balanceen menos que las de la generación anterior que incorporaban el motor de esta R nineT.

Del mismo modo, el Telelever está diseñado de tal forma que al frenar produce un efecto antihundimiento y aparte de mantener las motos muy planas, también consigue que no se ocasionen grandes cambios de geometrías en el tren delantero, como sí ocurre con las horquillas «normales» al hundirse en frenadas, etc.

Otra cosa que es reseñable es la compacidad del conjunto y lo sencillo que resulta ponerse a sus mandos. La zaga es muy sencilla y «limpia», y el asiento es muy plano en su parte trasera, así que pasarle la pierna por encima, tanto al subirse, como al bajarse, no representa el más mínimo problema. También es estrecho en su parte delantera, por lo que tampoco encontramos inconvenientes a la hora de llegar con nuestros pies al suelo. Además, incluso después de un largo día a sus mandos, no se siente incómodo, con un tapizado en símil de cuero muy agradable, que además le otorga un toque de distinción. De todos modos, para los que este asiento les parezca poco, en la lista de opciones existe un asiento «Confort», que como su nombre indica, debe ser más cómodo.

Muy ágil

La R nineT es un auténtico «lobo con piel de cordero». En la campaña de BMW se anuncia como tranquila, «buena» y muy fácil de conducir, y la verdad es que sí que lo es, pero desde el momento que realizas la primera maniobra o trazas la primera curva, te das cuenta que es una moto que gira mucho y que posee un tren delantero muy rápido de reacciones. Esto no quiere decir que no sea estable, ni que su aplomo sea dudoso. Todo lo contrario. Su comportamiento es muy moderno y sus reacciones son muy normales. Sí es verdad que el giro del motor provoca ligeros «cabeceos» al acelerar y al efectuar retenciones, pero basta con recorrer unos pocos metros para acostumbrarse a ellos. Además, bajo la tija cuenta con un amortiguador de dirección que no se ha colocado ahí por casualidad y está preparado para cumplir con su función en todo momento.

Hay que mencionar que la horquilla se hunde un poco más de lo deseado en frenadas muy enérgicas, pero también es cierto que trabaja con dignidad y que soporta sobradamente el peso y las inercias de esta moto. Por su lado, el amortiguador funciona con corrección y consigue que el tren trasero pise con firmeza, teniendo en cuenta que el elevado peso del monobrazo trasero hace que actúe sin descanso, especialmente sobre asfaltos irregulares. Se puede confirmar que BMW ha logrado un equilibrio muy bueno entre comodidad y deportividad en esta R nineT. Con la frenada ocurre lo mismo. No hay que presionar demasiado fuerte sobre la maneta para conseguir buenos resultados. Al mismo tiempo se dosifica muy bien y, como en todas las BMW, contamos con ABS, la única ayuda electrónica que posee esta alemana.

Constante

Respecto al propulsor, pocos secretos esconde a estas alturas. Es la última evolución del bóxer «de aire», con culatas HP2 con dos árboles de levas compartidos para la admisión y el escape. Su funcionamiento está muy logrado, con una respuesta contundente y constante desde muy bajo régimen. Sí es verdad que se acaba a poco más de 8.000 rpm, pero por otro lado cuenta con unos «medios» a los que se les puede llegar a sacar mucho partido. El funcionamiento del cambio parece haberse mejorado. Su accionamiento, sin ser especialmente rápido, es muy correcto, y la operación de engranar primera desde punto muerto no es especialmente ruidosa. Otra cosa que llama la atención es el bonito sonido que emana por su escape. El silenciador de doble salida, realizado por Akrapovic, emite un tono grave y «limpio» al mismo tiempo, sin llegar a ser molesto en ningún momento.

Salta a la vista que la R nineT es una moto muy llamativa y bonita, a la que BMW le ha querido otorgar un carácter exclusivo a pesar de su simpleza. Todo en ella ha sido elaborado con sumo cuidado y por este motivo su precio se ha fijado un tanto elevado. En nuestro país tendremos que desembolsar 15.950 euros para hacernos con sus servicios y hay que tener en cuenta que su equipamiento de serie es muy escueto. Incluso carece de indicador de nivel de combustible, pero esto no parece que haya sido tenido en cuenta por sus clientes potenciales. La muestra es que ya hay países en los que la primera partida se ha vendido antes incluso de que la moto llegue a los concesionarios. Y en algunos casos hablamos de varios cientos de unidades. No está nada mal. A España van a llegar 250 unidades y sabemos que todavía quedan algunas disponibles. ¿Vas a ser uno de los que se encargue de que se acabe ese primer pedido?