Desde la toma de Audi de la propiedad de Ducati muchas cosas están cambiando en la marca. Una es la inmersión en terrenos desconocidos para ella como es el caso de la moto que ahora presenta. La Ducati XDiavel no es una nueva versión de la Diavel pues se trata de una moto completamente nueva con la que descubre el mundo cruiser. Es más, entre ambas Ducati Diavel, nombre aparte, solo comparten el neumático trasero y los frenos, siendo en todo lo demás diferentes. Son dos motos para dos mundos diversos, el primero, el de las sensaciones deportivas, la X para el disfrute sin prisas, rodando a velocidad más pausada. Es lo que Ducati define como «low speed excitement», conducción relajada a baja velocidad, típica rutera, pero con la adrenalina del ADN Ducati. Justamente la X del nombre significa ese cruce de caminos de dos mundos aparentemente diferentes.
Ducati XDiavel, cruiser a la italiana
Ducati se introduce entre las cruiser utilizando su tradición y sus puntos fuertes para competir en un sector dominado de siempre por Harley-Davidson. Por ese motivo parte de su trabajo de creación se ha desarrollado en Estados Unidos, mercado principal cruiser, buscando analizar qué pide este segmento y su peculiar clientela. Pero siempre con ese ánimo de cruzar conceptos, el de Ducati, manteniendo su personalidad deportiva de potencia y conducción, con el cruiser de posición de conducción relajada, con los pies colocados avanzados hacia delante, brazos estirados y asiento atrasado. Además, acentuando sus factores de fuerza frente a la competencia como son el diseño, la presencia y la dotación tecnológica. Valores fundamentales entre las cruiser donde la apariencia tiene mayor importancia frente a otros aspectos. En Italia se han esmerado para hacerla muy sexy, larga, baja y musculosa.
Eso sí dando en la Ducati XDiavel al motor el auténtico protagonista de la puesta en escena y todo gira alrededor suyo para hacer emerger la figura del bicilíndrico, dejando al resto en segundo plano. La presencia del motor se ha cuidado hasta detalles como modificar la posición de la bomba del agua, colocada entre los dos cilindros, ocultando así los tubos de la refrigeración. Solo por cuestión estética, particularmente pulida y apreciable, siempre brillante como si de una estrella de cine se tratase. Con toda la arquitectura acabada en negro, el color de referencia de la moto, como símbolo de la exclusividad y la elegancia.
A esa presencia limpia del motor se adecúa también el sistema de escape, 2 en 1, con el tubo escamoteado para no restarle vista al motor. Lo mismo que el silenciador, un cuerpo central colocado bajo, por delante de la rueda trasera, escamoteado, casi invisible a primera vista, salvo por sus dos bocas de salida por el lateral derecho.
La Ducati XDiavel ofrece su cifra máxima de par a 5.000 rpm
El bloque motor tiene una configuración propia sobre la base Testastretta DVT pero con la cilindrada incrementada a 1.262 c.c. mediante el aumento de la carrera hasta los 71,5 mm -67,9 en la 1200-. Además, respecto al motor de la Ducati Multistrada 1200, se ha elevado la comprensión a una relación 13:1 contra la de 12,5:1 de la trail. Cambios orientados a la necesidad cruiser de tener mucho par a pocas vueltas y entregar el máximo poder tractor a medio régimen. Este propulsor garantiza a 2.100 rpm. un par superior a los 10 kgm., entregando la cifra máxima de 13,1 kgm. a tan solo 5.000 rpm. Características ideales para la conducción rutera a la que se suma una potencia máxima de 156 CV, con rendimiento entusiasta a todos los regímenes, sin acabar pronto, manteniendo su empuje hasta el corte de encendido.
El propio aumento de cubicaje se gestiona con el sistema DVT (Desmodromic Variable Timing) que permite una estirada del par consistente desde bajo régimen sin perder patada cuando se abre el gas más arriba. A todo ello se suma otro de los apartados en los que brilla Ducati como es la electrónica para la gestión del motor. La Ducati XDiavel disfruta de tres modos de conducción (Sport,Touring y Urban), control de tracción DTC, ABS «cornering» y, como gran novedad, el DLP (Ducati Power Launch). Primer modelo de la marca en incorporar el sistema para gestionar unas salidas fulgurantes. Opción que es totalmente programable en cuanto a la intromisión del control de tracción y al acelerador electrónico.
Dentro de este paquete electrónico sumamos el Control Cruise, las luces posteriores y anteriores full LED, el faro delantero con DRL (luz de día), cuadro de mando TFT e incluso el módulo Bluetooth, para interactuar manos libres con nuestros dispositivos móviles.
Que la marca italiana ha querido respetar los preceptos del cruiser se ve en soluciones como la transmisión por correa dentada, jamás antes usada por Ducati, sobre todo porque choca con el uso en motos deportivas, las hasta ahora unicas contempladas en su gama. La Ducati XDiavel incorpora una relación final de 28/80 que equivaldría a una relación de piñón/corona de 15/43. Menos ruido, uso más limpio y menor mantenimiento son las ventajas conocidss de la correa, que encajan en esa mentalidad cruiser de disfrutar de la conducción.
Muchas opciones de configuración de la posición de conducción
Conducción en la que el puesto de mando resulta definitivo. Acorde al espíritu de este particular segmento, la Ducati XDiavel ofrece una posición relajada, confortable, de verdadera cruiser, con el asiento bajo, el manillar ancho, y las estriberas avanzadas, a elegir entre cuatro posiciones (central, serie y /- 22,5 mm. respecto a la estándar). 60 es un número que define a la Ducati XDiavel en cuanto las diferentes configuraciones ergonómicas posibles, resultado de combinar las posibilidades de serie de la moto con los accesorios opcionales como los cinco asientos distintos que hay ( 20 mm de alto, - 10 mm...), varios manillares, tijas...
40 es otra cifra de las cifras destacadas de Ducati XDiavel, que deja ver el gen deportivo Ducati. Hace referencia al grado máximo de inclinación en curva, 40º, tan solo uno menos que la Diavel. A diferencia de otras cruiser, la Ducati XDiavel no solo va bien en línea recta también cuando llegan las curvas saca a relucir su chasis, suspensiones y frenos pensados para garantizar sensaciones en cualquier uso, sea en largas rectas como en zonas reviradas, e incluso en conducción deportiva. La horquilla es una Marzocchi de 50 mm., anodizada en negro, completamente regulable, mientras que el amortiguador es un Sachs, dotado de depósito separado.
Los frenos los proporciona Brembo mientras que los neumáticos los suministra Pirelli con la especial ancha goma trasera de 240. Neumático que destaca sobremanera al estar muy despejada la parte trasera, además de quedar calzada a una llanta de aluminio, espectacular. Justamente esta pieza es una de las diferencias entre las dos versiones disponibles, estándar y S. La segunda ofrece un acabado más exclusivo, como la llanta con radios negros, torneados, que se prolongan hasta el perfil exterior del aro. Las piezas de aluminio mecanizado, con acabado visto, están presentes en la S en las tapas motor, en los perfiles laterales del chasis, los protectores de la transmisión... Además la horquilla tiene las barras con tratamiento antifricción DLC que las tiñe de negro, mientras que las pinzas de freno son las Brembo monobloque M50. Toda la pintura es en negro brillante, mate en la estándar, incluso en el motor, con una banda negra opaca y un filete rojo en el centro del depósito. La versión S equipa el nuevo sistema DRL (Daytime Running Light) de luz diurna, con un perfil luminoso inconfundible. Un asiento con otro acabado y los espejos retrovisores en aluminio mecanizado completan las diferencias, todas de imagen pues el rendimiento es el mismo en ambas versiones.
El motor de la Ducati XDiavel es realmente poderoso
Tanto en su presencia como en su rendimiento, la Ducati XDiavel logra su objetivo de imponer, de impactar y de seducir al cliente caprichoso que gusta de presumir, pero que también es exigente con el comportamiento dinámico. Motivos no le van a faltar porque es una moto pintona pero que, además de cuerpo ofrece rendimiento. Montura muy cómoda, conseguida ergonomía, en la que quizás algunos encuentren la palanca de cambios un poco larga. Sonido inconfundible, personal, el del Desmo Ducati, cautivador, con toques metálicos gracias al nuevo silencioso, que apetece escuchar y disfrutar en marcha.
Como apetece degustar la riqueza de connotaciones que ofrece el motor, muy conseguido para su orientación cruiser, claramente por encima de la competencia. Combinando grandes aceleraciones de dragster con progresividad, sin asustar, permitiendo a su vez rodar relajados en marchas largas, a punta de gas, abusando de ir en sexta, pero encontrando pronta reacción cuando le damos al gas. Impresionante rendimiento porque tiene la elegancia y el servilismo cruiser con la adrenalina deportiva. Con un cambio bien escalonado, un embrague cómodo y un tacto del gas confortable. Sin exceso de vibraciones, aunque siempre perceptibles, sobre todo girando en regímenes altos.
Caprichoso es el uso de las opciones que la electrónica nos pone a nuestra disposición, sobre todo los tres modos de motor. Bien diferenciado entre ellos, a su vez personalizables para definirlos a nuestro capricho, según queramos como actúa el control de tracción, el ABS...
Apetece hacer kilómetros con la Ducati XDiavel porque incita a ello aprovechando comodidades como el control cruise. El asiento, aun siendo cómodo, puede pecar de algo duro de mullido, cansando con los kilómetros, además de que parece calentarse algo por efecto del calor que llega del motor y el escape.
El motor resulta sensacional pero en donde se desmarca la Ducati XDiavel como cruiser es en su comportamiento ciclo. Hablar de cruiser suele asociarse a torpeza dinámica por peso, volumen, distancia entre ejes... Curvear con agilidad no es lo que más le suele gustar a una cruiser pero ha llegado la Ducati XDiavel para romper con ese sentir.
Es tan ágil y divertida como cualquier deportiva de la marca, dejando rodar con absoluta fluidez, a ritmo, sin perder mucho terreno frente a las R deportivas. Es noble y ágil, zigzaguea con soltura, marca muy bien las trazadas, curvea con fluidez y hace de la conducción una experiencia gratificante. Contrario a lo que se podría pensar, el gran neumático trasero no es un condicionante que ponga límites a rodar en curvas rápido. Más bien lo contrario, transmite confianza y ganas de aprovechar toda su goma.
En nuestro primer contacto con la Ducati XDiavel, realizado en Estados Unidos, en California, San Diego, inmejorable escenario, epicentro del cruiser, las sensaciones que nos hemos traído han sido poderosas, de sonrisa eterna. Cambia la vida y el sentir sobre las cruiser, aunque para disfrutarla haya que pagar la notable cantidad de 23.299 euros para la versión S, tres mil menos la estándar. Al alcance de unos pocos, aunque en eso también la Ducati XDiavel se mantiene en la pauta cruiser, de moto cara, objeto de deseo. A España vendrán 200 unidades, mayoría S, que podréis equipar con la numerosa lista de accesorios que hay para ella. Clásicos populares como el escape Termignoni, tapas de bombas hidráulicas en aluminio, piezas de carbono, asientos con pieles de más calidad...
Mejorar la excelencia conseguida también por Ducati en un sector completamente nuevo. Si Don Antonio Ducati levantase la cabeza estaría orgulloso de lo que hace su marca en su casa de Borgo Panigale. Y lo que está por venir porque la marca boloñesa no para de innovar, ahora con la Scrambler Ducati 400, la Ducati Multistrada Enduro...
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