La distinción y el lujo en el trial vienen de la mano de Beta. La marca de Florencia nos vuelve a ofrecer un producto con gran exquisitez en su fabricación y componentes, que ensalza el refinamiento. Una montura coqueta que no sabe lo que significa la ordinariez ni la chabacanería y que aporta distinción a quien la posee. Por ello Beta sigue buscando al cliente que tiene buen gusto y que no le importa pagar más a cambio de tener más lujo.
La sustancia de esta montura se mantiene aunque se ensalza con la llegada del elegante color negro -presente incluso en el bastidor, el basculante y las llantas- como tono general en detrimento del más pasional rojo del año pasado. La EV 300 HF incorpora pequeños cambios que refinan aún más la respuesta y la calidad.
Selecta
Esta Beta supone la segunda versión de la quinta generación de las EVO, la cual, os recordamos, el año pasado estrenaba chasis del aluminio –lo usa Beta desde 1990- producido con la técnica del hidroformado. Es decir se le da forma al metal con alta presión de agua lo que permite moldear mejor el material, ganando resistencia, y, al llegar el agua a todos los recovecos, se consigue más volumen al bastidor para el depósito de gasolina –integrado en el propio chasis-, –ahora, de 2,8 l.
Para 2014 este motor 300 estrena otro cigüeñal –menos vibraciones-, biela reforzada, cárter modificado, culata con tornillo purgador del refrigerante transmisión primaria, engranajes de la bomba de agua en plástico y con otra relación que aumenta su velocidad de giro, diferente engranajes en la campana del embrague –la maneta es distinta y actúa más suave-, codo de escape de forma diferente –mejor respuesta en alta y baja-… El cuestionado desarrollo del cambio se modifica acortándolo con el montaje de una corona de 42 dientes -uno menos-… Para la parte ciclo la EVO ´14 incorpora nuevas tijas –más ligeras y vistosas, en forma de alas de gaviota-, diferentes retenes –menos fricción-, amortiguador con otro tarado, distinto cubrecárter, estriberas –más ligeras, robustas y más agarre-…
Los cinco sentidos se estimulan ante esta montura, plagada de detalles, algunos muestra de diseño italiano como el larguísimo guardabarros trasero con la cola en forma de lanza –¿no os parece como una imagen típica italiana como lo de llevar los cuellos de la camisa levantados?-.
La puesta en marcha de la Beta, con el pedal al lado izquierdo, sigue resultando chocante al inicio, por la falta de costumbre, ante una solución que, sin ser mala, pertenece más bien a épocas pasadas en las que el piloto se bajaba de la moto para hacer más fuerza para arrancar con la pierna derecha por el lado izquierdo de la montura. Aun así, pronto nos acostumbramos, costándonos más usarla cuando se nos para el motor en la zona. Complicado se mantiene el acceso al mando del aire, muy tapado por el escape, aunque, por fortuna, casi nunca hace falta usarlo.
La Beta es muy buena comunicadora, sabe expresarse bien y mantiene un gran diálogo con el piloto, mostrando muy buena conexión –telegenia, si fuese presentadora de la tele-. Con ella nos sentiremos felices pues incita a hacer no lo que uno cree sino lo que tiene que hacer. La EVO os permite lograr lo que podéis lograr mostrando mucha sensibilidad, imaginación e incluso humor. Un buen antídoto para la agresividad y una montura que es principalista, en cuanto a que toma decisiones para hacer las zonas y utilitaria porque analiza consecuencias. La Beta nos hace sentir aquello de que la vida deber ser buena para mí y para el resto.
Ciertamente filosóficos nos pone esta trialera que destaca por la nobleza y amabilidad de su chasis y de su motor. Unas cualidades que son del agrado tanto del piloto aficionado como el del nivel pro.
La posición de conducción es muy cómoda, aunque la EVO no puede ocultar su anchura central por el ancho del motor, volumen que directamente se refleja en la báscula. La EVO es más pesada que sus otras rivales 2T, aunque la masa está muy concentrada en la zona central, redundando en estabilidad. Por eso es una moto fácil de llevar, por su gran aplomo en el que revierte esa mayor anchura. Lo que es incuestionable es que los 73,6 kilos que pesa llena se aprecian al realizar movimientos en parado. Así nos lo confirma Sandra Gómez, invitada a este test «frente a otras monturas 2014 probadas la masa, al mover de atrás, se nota. Pero, a favor tiene que es una moto que cuando subes los escalones se pega muy bien a ellos. Es muy cómoda, va por el sitio, no se mueve. Luego para saltar ya no es tan natural. Digamos que cuando rueda por el suelo es perfecta pero cuando despega las ruedas ya no es tan buena, siempre referido a trial de nivel competición».
Rodando más tiempo, haciendo más zonas, sobre terreno de grandes rocas y tierra de buen agarre, con algunas raíces de pinos, Sandra saca más conclusiones: «es más la sensación de que pesa que lo que realmente afecta. Porque al hacer la cabra se mueve bien pero la moto se queda clavada en el suelo. Digamos que es no es tan viva o reactiva como otras. Algo a favor para los que tienen menos nivel. La EVO permite llevarla por donde quieres. Es muy fácil y respeta las trazadas. Yo la haría más estrecha pero manteniendo la estabilidad que tiene. Es una moto con la que en zonas fáciles no vas a poner pies, porque se sujeta mucho. Pero en terreno más difícil tienes que asegurar. Para giros cortos, saltos… ese peso no me ayuda».
La sensación de aplomo lo completa la suspensión con un amortiguador absorbente, con buen tacto, que ayuda a tener mucha tracción, sin excesivo rebote, nada alocada, en buena configuración para el «non stop». No tan bien ha funcionado la horquilla –recordad que es una Paioli, aunque ahora fabricada por la propia Beta tras el cierre de la marca italiana- que tenía un tacto extraño en compresión. Lo sentimos nosotros y lo corroboró Sandra: «tiene como un tope en la horquilla que no la deja extenderse bien. Al levantar la rueda de adelante parece que se queda en el suelo. Pero imagino que se puede corregir».
En el análisis de los frenos nos reafirmamos en lo dicho en 2013, en cuanto a que brillan tanto por su presencia –preciosas bombas- como por su potencia y precisión, sobre todo el delantero, muy eficaz al más mínimo gesto sobre la maneta. El pedal del freno clava demasiado, va muy levantado.
La respuesta afable se aprecia también en el motor, que es muy progresivo. Para ser un 300 resulta dócil y controlable, no tiene un golpe de gas que acongoje y responde muy lineal desde abajo. En cualquiera de las dos curvas de potencia «al abrir gas –señala Sandra-, puede parecer que no hay reacción pero finalmente sí hay. Si quieres que acelere, acelera, no se queda, tiene impulso. Es muy agradable y cansa poco». Apuntar que de las dos curvas disponibles -«hard/soft»- la diferencia está hasta el medio régimen con más bajos en la posición «hard». Como 300 que es su rendimiento es muy constante desde el ralentí hasta el régimen máximo, con una óptima respuesta inclusive para esas empuntadas más complicadas a las que hay que subir con velocidad.
El embrague ha mejorado con las modificaciones introducidas, con tacto suave y buena respuesta al soltar la maneta resistencia al uso agresivo. Recordad que en opción se vende un kit con otra campana, discos y pistón de menor diámetro, que aportan carácter más agresivo.
El cambio trabaja genial, con el desmodrómico nuevo del año pasado, ofrece precisión al meter las marchas, tanta que a veces parece que no ha entrado, pero sí. El distinto desarrollo secundario modifica algo la configuración del cambio de seis marchas, quye el año pasado criticamos y que nos repetimos: con la primera muy corta –los «top» podréis prescindir de ella- y la segunda larga. Por eso, en esta EVO la tercera es útil pues es como la segunda de otras rivales.
Elegante y educada en todos los sentidos. La Beta EVO es una montura servil que intenta agradar siempre. Los menos técnicos agradecerán su carácter y los que compitan tendrán que buscar mayor agilidad.
Santi Ayala Fotos: Jaime De Diego
Colabora: Sandra Gómez
Lo más
Chasis aplomado
Sensación de seguridad
Estética y acabados
Lo menos
Tacto de la horquilla
Pedal de freno alto
Peso algo alto.
Conclusión
En negro, color asociado al glamour y la elegancia máxima, la EVO sigue cautivando por ser una montura refinada, ecuánime y con la que siempre sabes que no tendrás malos momentos. Sólo el peso algo elevado, por el tamaño de su veterano bloque motor, la penalizan.