Cuando le preguntas a Rubén Xaus por sus mejores recuerdos habla siempre de sus temporadas en el equipo de fábrica de Ducati, de 2001 a 2003. Puede que sorprenda a algunos teniendo en cuenta que el piloto catalán pasó dos temporadas en MotoGP, la teórica categoría reina del motociclismo a nivel mundial, pero lo cierto es que fueron precisamente aquellos años cuando SBK podía competir con MotoGP (Dunlop, Michelin y Pirelli rivalizaban en SBK). Esa mayor rivalidad venía además de la competencia entre Dorna, organizador de MotoGP, e Infront Motor Sport, el de SBK en Italia.
De aquellas tres temporadas pasó bajo el paraguas del equipo oficial Ducati, Xaus recuerda con especial cariño la ronda en Laguna Seca de 2003. Había sido un año de cambios para Ducati que estrenaba la Ducati 999 rompiendo por primera vez con el diseño establecido por Tamburini en las 916, 996 y 998. Rubén tenía como compañero de equipo a Neil Hodgson, que aquella temporada se proclamaría campeón del mundo de SBK con más de cien puntos de diferencia, y la victoria se le había resistido hasta San Marino, donde firmó un doblete. Con aquel impulso, SBK aterrizaba en el icónico circuito de Laguna Seca.
En 2003, Dunlop, Michelin y Pirelli competían en Superbike al mismo tiempo.
Como suele ocurrir en estos, algunos de los pilotos del AMA aprovecharon la ocasión para hacer un wildcard en la categoría. Aaron Yates y Mat Mladin, gran dominador de aquel campeonato hasta la aparición de Ben Spies, intentarían complicar la tarea en un circuito que conocían al dedillo. Sus tiempos eran verdaderamente prometedores, Mladin a bordo de la Suzuki GSX-R1000 se había llevado la Superpole con un tiempo de 1'25.561, más de cuatro décimas más rápido que Regis Laconi. También Yates se mostró muy competitivo con la cuarta plaza en esos cronos. ¿Y las Ducati de fábrica? Apenas pudieron seguir la estela de los locales siendo Rubén el mejor clasificado en séptima plaza y Hodgson en octava.
Pero lo que importaba era el domingo. En la primera carrera, Regis Laconi se ponía al frente peleándose por el liderato con la Suzuki de Mladin mientras que por detrás aparecía Xaus remontando posiciones. En sólo cinco giros, Rubén se había puesto a rebufo de Mat y tras cuatro giros estudiando y peleando con el crack australiano, conseguía colocarse como líder. Pero aquella primera carrera acabaría de forma abrupta cuando Xaus caía en la curva de entrada a meta.
Nueve en la primera, 11 en la segunda. Las caídas y abandonos eran mucho más comunes.
Aunque con un cero en su casillero, quedó demostrado que el #11 tenía ritmo como para luchar de tú a tú por la victoria, algo que no se hizo esperar. En la segunda carrera del día, Regis Laconi apenas aguantó dos vueltas como líder siendo en esta ocasión Aaron Yates el que le disputaba la plaza. Por detrás, Rubén volvía a escalar posiciones rápidamente y en el cuarto giro se puso al frente. Desde ese momento, la Ducati número 11 pasó líder en todas y cada una de las 24 vueltas restantes metiendo una diferencia final de once segundos y medio a sus rivales. Además de sus 25 puntos, Xaus conseguía también ser el primer español en ganar con una cuatro tiempos en territorio yankee. Carlos Checa sumó cinco victorias en Miller también con Ducati pero el precedente será siempre Rubén.
Aquel dominio le sirvió como impulso para conseguir cuatro de sus siete victorias en las rondas restantes, incluyendo un espectacular doblete en Imola, el circuito en donde tradicionalmente Ducati debe ganar y demostrar su poderío para contentar a la afición local. En 2004, tanto Neil como Rubén darían el salto a MotoGP con la estructura D'Antin y las Ducati satélite.
