Los compañeros de MotoGP tuvieron la oportunidad de charlar brevemente con Valentino Rossi días antes de que se fracturara tibia y peroné, diciendo adiós al Gran Premio de San Marino y la Rivera de Rimini en Misano y complicando sus opciones al título. Valentino, como siempre, habló sin tapujos y desde la tranquilidad, bromeando a ratos y siempre con una sonrisa de oreja a oreja.
Yo no soy viejo, ¡quizás lo que pasa es que el resto son muy jóvenes!
Rossi comenzaba quitando hierro a una de las críticas más duras que le han dedicado durante los últimos años. Desde todos los ámbitos, desde aficionados a periodistas, se repite constantemente el mismo mantra sobre su edad… y él se empeña, con todavía más fuerza, en demostrar que se equivocan.
Curiosamente, uno de los aspectos que tratan en esta entrevista es cómo el paso de los años afecta a tu rendimiento en pista. “Lo primero es el cuerpo; ahora es más difícil y tengo que entrenar más, es más difícil recuperarse…”, decía un Valentino que ya en 2010 superó la fractura de la misma pierna.
Pero también destacaba un segundo aspecto, “el segundo es el mental, es más fácil cuando eres más joven. Las nuevas generaciones son siempre más fuertes y más rápidos pero es también un gran reto. Se aprende muchísimo de ellos. Yo también aprendí de los mayores cuando era joven, pero ahora es al contrario”. En este sentido el campeón italiano subraya también un punto importante, el peso de la estrategia en carrera hace años y ahora: “Antes tenías que ser más listo, tenía más peso la estrategia en carrera. Ahora tienes que ir con el gas a tope desde el principio hasta el final y físicamente es mucho más exigente”.
Cada GP es como lanzar una moneda al aire, ¿saldrá bueno o malo?
A la hora de hablar sobre la evolución de la Yamaha, Rossi mide bien sus palabras pero sin miedo a hablar delante de la cámara. Reconoce que nada más subirse a la nueva moto, no se sintió cómodo. En algún momento, la fábrica japonesa tomó algunas medidas para mejorar la degradación de los neumáticos pero estas medidas crearon nuevos problemas. Punto en el que se encuentran o encontraban viendo su rendimiento en Silverstone. Valentino cita también la lotería que viven cada viernes cuando, por primera vez, salen a rodar con los neumáticos. “Es como lanzar una moneda al aire, ¿qué saldrá? ¿será bueno o malo? Así funciona”, afirma acordándose de que creía poder ganar en Jerez o Barcelona pero que los resultados fueron muy negativos. Y al contrario, destacando la carrera de Austin.
Lo primero que haces al llegar al box es ver tu posición. Lo segundo, mirar la de tu compañero.
A su compañero Maverick Viñales lo define como “un gran talento y jodidamente joven”, un piloto del que uno puede aprender mucho en cuanto a pilotaje.
Por último, Valentino acepta que muchos pilotos tienen su posición en Yamaha como objetivo pero avisa, “Será difícil (se ríe), yo daré el máximo”. Respecto a la hora de su retirada, comentaba que llegado el momento decidirá basado en las primeras seis carreras de la temporada, ”decidiré en base a si puedo pelar por el podio y la victoria”.