Los cuarenta son los nuevos treinta. En la era de la precocidad, de cambios de leyes para permitir llegar al mundial a los quinceañeros más talentosos, una serie de pilotos desafían la lógica de la edad.
Algunos como el británico Jeremy McWilliams –podio en la última North West 200 a los 54 años- o el francés Philippe Le Gallo –que tras cumplir 60 sigue corriendo en Superstock 600 dentro del Campeonato de Europa de Moto2- superan cualquier idea preconcebida sobre la edad en el motociclismo de competición, en cuya élite muchas veces la edad máxima está cifrada en 50 años.
Sin embargo, a estos seis ‘cuarentones’ no les basta con figurar. Pese a que nacieron en los 70 (o antes), no sólo siguen corriendo, sino que lo hacen con el objetivo –y con opciones reales- de ganar.
VALENTINO ROSSI
En Assen volvió a demostrar que puede seguir codeándose con los mejores pilotos del mundo, por si alguien lo dudaba. Subcampeón del mundo de MotoGP en 2014, 2015 y 2016 –puesto que ocupa en la provisional de 2018-, su pervivencia en la élite y su capacidad para adaptarse a los nuevos estilos de pilotaje que requieren las actuales MotoGP valen tanto o más como los títulos mundiales que consiguió de joven.
Si bien es cierto que ‘sólo’ tiene 39 años, ya está a las puertas de ser todo un cuarentón; y dada la magnitud de la empresa que persigue (décimo título mundial, octavo de MotoGP) sería una temeridad no incluirle en la relación de cuarentones. Además, tras renovar hasta 2020, como mínimo se retirará con 41, y no hay nada que lleve a pensar que de aquí al inicio del próximo curso –donde ya sí será un cuarentón literal- no seguirá batallando por el mismo objetivo.
Sus nueve títulos mundiales (1997, 1999, 2001, 2002, 2003, 2004, 2005, 2008, 2009) y sus 115 victorias quedan en un segundo plano con la cara que pone cuando le recuerdan que lleva un año sin ganar, casi como avergonzado. Podría estar regodeándose en los cuatro podios que lleva en ocho carreras, pero está más frustrado por no ganar. Eso lo dice todo.
SHANE BYRNE
Lamentablemente, el británico Shane Byrne no pudo disputar la última carrera del British Superbike, y ni siquiera sabe si podrá volver a correr. El motivo es el gravísimo accidente que sufrió en un test del BSB en Snetterton, y en el que llegó a pensar que podría quedarse paralizado.
Un accidente que se saldó con dos contusiones pulmonares, todas las costillas fracturadas, cuatro vértebras rotas, el cuello roto por dos sitios, el tabique roto, la clavícula y otras fracturas múltiples en la espalda. Un parte de lesiones que haría plantearse la retirada hasta a un piloto veinteañero, pero ‘Shakey’ está deseando poder volver. Cumplirá 42 años en diciembre.
Cómo no querer volver cuando todavía es el vigente campeón del British Superbike, campeonato en el que es el más laureado de la historia con seis títulos (2003, 2008, 2012, 2014, 2016, 2017), y en el que en este 2018 también estaba metido de lleno en la lucha por el séptimo hasta el accidente, con una victoria y tres podios en seis carreras.
CARMELO MORALES
Tras la retirada del también sempiterno Javi del Amor, ‘Carmelito’ Morales se ha quedado como el más veterano del panorama español de la velocidad, donde se ha convertido en un auténtico mito, venciendo en prácticamente todo lo que ha corrido a nivel nacional y continental sin importar la cilindrada de la categoría o la marca de la moto que le tocara en suerte.
Su palmarés es un auténtica barbaridad. Posee seis títulos Europeos: dos de Superbike (2015, 2016) dentro del FIM CEV Repsol; y otros cuatro de cuando se disputaba a carrera única: tres de Superstock (2008, 2009, 2012) y uno de Supersport (2010). A nivel nacional ya comenzó ganando la Copa Cagiva de Motociclismo 125cc en 1997 y la Copa Aprilia 250cc de 1999, antes de empezar a sumar títulos de campeón de España, donde también acumula cinco: Fórmula Extreme (2008, 2009), Moto2 (2010), Stock Extreme (2012) y Superstock 1000 (2017).
En unos días cumplirá los 40 años y, tras su victoria en Navarra, lo hará como líder del Campeonato de España de Superstock 1000, donde defiende el título y en el que sigue mostrando una velocidad increíble, que acompaña con una regularidad intachable para batir a talentos mucho más jóvenes que él, como el chileno Maxi Scheib o el español Alejandro Medina.
VINCENT PHILIPPE
Por más que la resistencia sea una disciplina que a priori permite estirar la vida deportiva de un piloto más allá que las competiciones de velocidad pura, y en la que la experiencia es un grado, es encomiable ver al francés Vincent Philippe al pie del cañón a sus 40 años, cumplidos el pasado enero.
Nueve títulos mundiales de resistencia le contemplan, todos con el Suzuki Endurance Racing Team (2005, 2006, 2007, 2008, 2010, 2011, 2012, 2013, 2015); haciendo equipo con pilotos como Keiichi Kitagawa, Mathieu Lagrive, Julien Da Costa, Olivier Four, Freddy Foray, Guillaume Dietrich, Sakai Daisaku, Anthony Delhalle, Yukio Kagayama, Etienne Masson y Gregg Black.
Más de una decena de pilotos con los que ha ganado carreras, y que han ido pasando por el equipo más laureado de la historia de la modalidad, en el que él sigue siendo imprescindible. Pese a que llevan casi dos años sin ganar, siguen estando entre los grandes favoritos en cada prueba en la que participan, y Philippe sigue demostrando que sus 40 años no son óbice para codearse con los nuevos talentos del EWC.
MICHAEL RUTTER
Sin John McGuinness ni Bruce Anstey, el cuarentón que sigue batallando con piloto mucho más jóvenes en las principales road races es Michael Rutter. Durante el año compite en la categoría de Superstock 1000 del BSB, pero donde realmente lo pone absolutamente todo es en las principales road races.
A sus 46 años, Michael Rutter sigue siendo un habitual en el cajón de las grandes citas del panorama: sin ir más lejos, en la última North West 200 –carrera que domina otro casi cuarentón como Alastair Seeley y en la que Rutter suma 14 victorias- logró hacerse con un podio en la categoría de Superbike a tan solo tres segundo del ganador, Glenn Irwin.
En el TT de la Isla de Man también se dejó ver por el cajón: más allá de ganar el TT Zero de motos eléctricas –donde ha logrado cuatro de sus seis victorias en el TT-; subió también al podio en la categoría Ligthweight, solamente por detrás de Michael Dunlop y Derek McGee.
TROY BAYLISS
Lo de Troy Bayliss merece capítulo aparte. En primer lugar, porque ni siquiera nació en los setenta: ¡lo hizo en 1969! La friolera de 49 años contemplan al mítico piloto australiano, que sigue mostrando un estado de forma envidiable. El segundo motivo es que, a diferencia de los otros cinco, Bayliss se retiró de la competición para volver.
Es, junto a Carl Fogarty y Jonathan Rea, uno de los tres pilotos en haber conquistado al menos tres veces el Mundial de Superbike (2001, 2006, 2008); y también sabe lo que es ganar en MotoGP, cosa que consiguió en 2006. Se retiró en la cúspide de las motos de serie a finales de 2008, pero volvería con casi 46 primaveras para sustituir a Davide Giugliano a inicios de 2015.
Un noveno puesto a su edad y sin preparación le hizo ver que podía rendir a un gran nivel, y para esta temporada decidió volver a tiempo completo al Australian Superbike, campeonato que no llegó a ganar; una deuda que quiere saldar. Después de haber logrado su primera victoria este fin de semana, a ver quién le dice que no lo va a conseguir.