Hoy ha dado comienzo en la región de Macao su espectacular y peculiar Gran Premio con Michael Rutter, un clásico del Tourist Trophy y otras road races, al frente de los primeros entrenamientos libres. Y con semejante prueba delante de nuestras narices, ¿qué mejor que abrir el apetito con uno de sus grandes momentos?
Sobre estas líneas encontraréis el vídeo de la participación de la leyenda del motociclismo, Kevin Schwantz, en el Circuito da Guia. Kevin compitió en 1988 con la Suzuki RGV500 decorada con los colores de Pepsi, por aquel entonces metida de lleno en el mundial de 500cc. En efecto, el tejano se puso a los mandos de una dos tiempos de 500cc pensada para circuitos mundialistas para llevarla entre los muros, paredes y árboles de lo que en realidad son calles y avenidas de una ciudad con una de las mayores densidades de población del mundo.
Schwantz, que competía con pilotos que llevaban máquinas derivadas de las SBK o las empleadas en resistencia, no tuvo rival y una vez aclimatado a rodar entre tabiques chinos comenzó a dar show del bueno. Con una diferencia abismal separándole de sus perseguidores, donde se podían encontrar a tipos como Ron Haslam o Robert Dunlop (padre de Michael y William) pasó buena parte del recorrido en una rueda.
Caso tres décadas después, Kevin no puede creer cómo ocurrió: “Lo pienso ahora y me pregunto cómo me dejó Suzuki hacer algo así”. Y se imagina lo que podría haber ocurrido, “tan maduro como un chaval y haciendo tantas estupideces como en circuito… wow, ¡lo que podría haber hecho entre esos muros y lo que hubiera dolido!”.
No me explico cómo Suzuki me dejó competir.
Kevin, a pesar de lo que podamos ver ahora en vídeos de televisión, reconoce que no fue llegar y besar el santo. El Circuito da Guia, hoy algo cambiado para hacerlo más seguro, tiene curvas muy complicadas en subida y a ciegas tanto a izquierdas como derechas, además de tener partes rapidísimas. James Whitham, un clásico de SBK en Gran Bretaña que competía en el GP y hoy comentarista de Eurosport para el British Superbikes, bromea asegurando que el verdadero problema de Kevin fue la falta de recursos; tenía que ahorrar en gomas delanteras.
Y aunque quizás Kevin no lo diga, el que era jefe de equipo de Suzuki en 500, Garry Taylor, contaba en su biografía una razón distinta. Como ahora, las road races eran consideradas carreras de “hombres”, infravalorando a los pilotos de GP. Kevin quiso demostrar a todo el mundo la pasta de la que estaba hecho.