Cuando se hizo patente que la crisis de la que todavía no nos hemos rehecho, era algo realmente serio, Honda dio un golpe de timón a su política, y comenzó a diseñar motos adecuadas a la nueva situación. La adaptación al medio comenzó con la serie NC de 700 cc, y más tarde Honda lanzó una nueva serie más convencional con motores bicilíndricos de 500 cc.
Las nuevas Honda CB eran más dinámicas, tenían las mismas prestaciones, y se dirigían a un público más joven, todos esos usuarios del carnet de moto A2, a los que encajaba perfectamente no sólo por orientación, sino también por precio. La Honda CB500F, el modelo naked es el más sencillo de la serie, y también el que tiene más éxito comercial. La Honda CB500F se ha mantenido inalterada en el mercado hasta la pasada campaña, pero en 2016 ha sufrido algunas modificaciones que mejoran su equipamiento y modifican la carrocería, además de equipar un nuevo escape, entre otras mejoras.
De las motos que más éxito tuvieron la pasada temporada, la Honda CB500F es la única que trabaja exclusivamente en el segmento del carnet de moto A2, con una potencia nominal de 35 kW, aunque evidentemente esto no quiera decir que es un producto creado únicamente para ellos. La Honda CB500F es una moto bastante tradicional, una moto que Honda ha diseñado especialmente para que sea fácil, y teniendo en cuenta lo fáciles que siempre son las motos de esta firma, la convierte en la moto ideal para los noveles o para los que no quieren sorpresas de ningún tipo.
Es muy baja, estrecha de cintura y ágil, con un motor de rendimiento moderado, pero también sin sobresaltos a lo largo de su gama de revoluciones. Aun así, las Honda CB500 se lanzaron como un producto más dinámico que las NC, sin posibilidad de cambio DCT y con motores que alcanzan regímenes cercanos a las 9.000 rpm, y que también son completamente nuevos en su diseño, inspirados en modelos deportivos. De las cinco motos más vendidas en 2015 es sin duda la más simple de concepto, la más indicada para noveles, pero también la más económica en su uso diario, porque tiene un consumo muy parco, y gracias a la moderación en la potencia, es la que menos consume componentes sometidos a desgaste.
El hecho de que sea una moto diseñada para un uso diario, no quiere decir que no te vayas a divertir con ella si quieres, porque también esta faceta está contemplada. En su bicilíndrico en paralelo no hay grandes dosis de potencia, pero es una moto ligera y muy ágil de parte ciclo, aspectos que se combinan con una posición a los mandos confortable a pesar de lo compacto del conjunto. En una conducción recreativa, lo que pierde en facultades, lo gana en intuitividad, porque siempre sabes lo que hace, y te adaptas a cualquier situación. Tienes que intentar dejarla correr, sin perder velocidad, sin descompensar las suspensiones en las frenadas, sin necesitar estrujar el motor. Esta filosofía es además igualmente válida para el resto de su conducción.
La Honda CB500F es una moto tranquila, con un toque de picardía, pero sobre todo un vehículo diseñado para hacerte las cosas fáciles y baratas en la vida diaria. Para la mayoría la crisis económica no ha pasado, y aunque muchos demanden motos espectaculares, tecnológicas, deportivas y emocionales, lo cierto es que esta Honda sigue mirando al mismo lugar, y adaptándose como pocas a las necesidades de lo que todavía es una gran mayoría.
La opinión de su propietario (Eduardo Samajón, 33 años)
Después de un acalorado debate conmigo mismo entre pasión (Harley-Davidson Sportster Iron 883) y razón (Honda CB500F) me decidí por esta última. Y he de decir que no he podido quedar más satisfecho. Su autonomía, consumo y escaso mantenimiento fueron factores determinantes para el uso diario que tenía pensado darle. Me hago unos 100 km al día y son kilómetros de placer. Es cómoda, manejable, pero sobre todo silenciosa, no suena nada de nada. Me sorprendió el espacio en el colín, donde cabe una cadena corta. En ciertos momentos se queda un poco corta, pero como primera moto «gorda» cumple perfectamente su cometido.
Te puede interesar:
Prueba de la nueva Honda CB500F 2016
Prueba de la Honda CB500F 2015
La Honda CB500F frente a la Honda NC700S