El británico Danny Kent ha perdido su sitio en el Bike Devil Sweda MV Agusta con el que estaba disputando el British Superbike 2019, a raíz de un incidente que le ha costado una condena de cuatro meses de prisión por tenencia de arma blanca: el piloto de 25 años llevaba un cuchillo de seis pulgadas (15 centímetros) cuando se vio involucrado en una pelea el pasado 7 de marzo.
La historia es un tanto rocambolesca: su hermano se enfrentó a un hombre de 63 años, al parecer a raíz de una deuda. Danny intervino y empujó al hombre mayor. Un testigo vio cómo a Danny se le cayó el cuchillo e informó a la policía de lo sucedido. Kent se ha declarado culpable de la acusación de tenencia de arma blanca y ha pedido perdón, aunque ha asegurado que no hubiera utilizado el cuchillo.
En palabras de su abogado, el piloto no tenía el cuchillo para ningún propósito inapropiado, sino para "abrir cajas en relación a su trabajo", según recoge la BBC. El abogado asegura que Danny intervino en la trifulca pensando que su hermano estaba siendo víctima de un ataque.
Los hechos le han costado una pena de cuatro meses de prisión, una condena suspendida durante un año. Lo que no tendrá que esperar un año es la decisión de su equipo: "Con efecto inmediato el equipo ha roto con Danny debido a una reciente condena", escribían en sus redes sociales, donde casi de inmediato anunciaban la incorporación de Gino Rea para la ronda de Cadwell Park que se disputa este mismo fin de semana.
La carrera deportiva de Danny Kent no levanta cabeza. En menos de cinco años ha pasado de ser la gran esperanza del motociclismo británico a convertirse en un juguete roto. Parece ya muy lejano aquel año 2015 en el que se convirtió en campeón del mundo de Moto3, acabando con una histórica sequía británica en los grandes premios, donde no levantaban un título desde el último de Barry Sheene en 1977.
La carrera de Kent había comenzado a los siete años en minimoto, y con once ya fue campeón británico de MiniGP70. Pasó por el CEV de 125GP y la Red Bull MotoGP Academy, y con la desaparición de ésta última a la Red Bull Rookies Cup, donde perdió el título por apenas seis puntos ante el estadounidense Jake Gagne.
Ese mismo año debutó en el Mundial de 125cc: primero con un wild card en Silverstone a lomos de una Honda, y después corriendo los últimos cinco grandes premios con una Lambretta en sustitución de Isaac Viñales. Al año siguiente firmó por el Red Bull Ajo Motorsport y, aunque en la segunda carrera ya rozó el podio, no llegó a pisarlo en la que sería la última temporada de la historia del octavo de litro.
Sin cambiar de equipo se subió a la KTM para el estreno de Moto3, logrando su primer podio en Assen y sus dos primeros triunfos mundialistas en Japón y Valencia, para terminar el año en cuarta posición. Aprovechó la inercia y saltó a Moto2, pero lo hizo con el Tech 3, y pese a que logró puntuar en varias carreras (algo nada sencillo con la Mistral), decidió regresar a Moto3 con su antiguo equipo y una Husqvarna.
Dos podios y un octavo puesto fue un bagaje algo discreto para un piloto que bajaba para ser campeón, pero tras fichar por el Leopard Racing para llevar una Honda en 2015 todo cambió. Su comienzo fue arrasador: podio en Qatar y tres triunfos seguidos. En las nueve primeras citas consiguió cinco victorias y ocho podios, con un cuarto puesto como peor resultados. Encarriló el título y aunque en la segunda mitad solo pisó el cajón con su triunfo en Silverstone, finalmente fue campeón del mundo por seis puntos ante Miguel Oliveira.
Era lo que Gran Bretaña había esperado durante tanto tiempo, y Kent saltó a Moto2 por segunda vez, pero con mayores garantías: una Kalex y la misma estructura: el Leopard. No fue bien: apenas tres presencias en el top ten y el 22º puesto en la general. El Leopard se fue de la categoría y la estructura volvió a ser el Kiefer Racing, que cambió a Suter.
El 2017 fue el año que demostró que algo no iba bien en la carrera de Kent. En la tercera cita del año, el GP de las Américas, la relación saltó por los aires: después de no salir a carrera por unas supuestas molestias de espaldas, anunció que dejaba el equipo por diferencias irreconciliables.
Dos carreras después volvió a Moto3 con el Red Bull KTM Ajo como wild card, y tras otro breve paso por Moto2 al sustituir a Iker Lecuona en el CarXpert en Mugello, Ajo le llamó para correr en Sachsenring reemplazando al lesionado Niccolò Antonelli. En Austria volvió a Moto2 con el Dynavolt Intact por el lesionado Marcel Schrotter, pero se lesionó en el FP1 y no pudo correr.
Terminado un 2017 en el que pasó por cuatro equipos de dos categorías para correr apenas seis carreras, en 2018 firmó con el Speed Up por dos temporadas. No llegó a acabar la primera: el equipo le cortó por malos resultados (apenas llevaba ocho puntos mientras su compañero Fabio Quartararo había llegado a ganar) a falta de cinco carreras para el final.
Él mismo dijo que podría haber sido su última carrera mundialista, pero a cambio debutó en el British Superbike en la última ronda de 2018 a lomos de una Suzuki del Halsall Racing, acabando 12º en la tercera carrera tras haber abandonado en las dos primeras. Para este 2019 se le esperaba en la lista de inscritos, pero los equipos iban confirmando a sus pilotos y su nombre no aparecía. La temporada comenzó sin él.
Cuando parecía que iba a pasar un año en blanco, a finales de mayo confirmó que había fichado por el proyecto de MV Agusta Paramatta, que a partir de 2020 tendrá apoyo del Reparto Corse de la firma italiana. Después de varios test privados, por fin se presentaron en parrilla en la ronda de Snetterton, la sexta de la temporada.
Allí Kent no pudo acabar la primera carrera y se quedó sin salir en la segunda. En Thruxton la cosa mejoró algo pese a salir sin puntos: tras retirarse en la primera manga finalizó 18º en la segunda. La tercera oportunidad iba a ser Cadwell Park, pero paradójicamente se ha quedado fuera por unos hechos sucedidos antes de firmar. En su lugar estará Gino Rea, viejo conocido del Mundial de Moto2 y del Mundial de Supersport.
Ahora, el futuro de Danny Kent es una incógnita. Recientemente hemos visto casos de pilotos que han podido volver tras protagonizar algunos episodios controvertidos como Héctor Barberá o Romano Fenati. El tiempo dirá si Kent vuelve a ser noticia por sus logros en pista.
