No es ningún secreto que el motociclismo de velocidad sudamericano no pasa por su mejor época. Muy atrás quedan los años en los que Venezuela era un país puntero en las clases intermedias del Campeonato del Mundo, de la mano de Johnny Cecotto y Carlos Lavado.
También cuesta ya observar por el retrovisor la época en la que el brasileño Alex Barros se codeaba con lo más granado de la clase reina, mientras Sebas Porto ponía con frecuencia la bandera argentina en lo más alto del podio del cuarto de litro.
De hecho, con el título de Brad Binder, América es el continente que más tiempo lleva sin hacerse con un título mundial –el estadounidense Nicky Hayden en MotoGP 2006-, y si acotamos a Sudamérica, hay que retroceder hasta el segundo título de 250cc de Carlos Lavado, en 1986.
Más allá de los éxitos del chileno Pablo Quintanilla en los rallies cross-country; en lo que se refiere a velocidad, y con permiso de pilotos como el colombiano Yonny Hernández o el venezolano Robertino Pietri, hay dos pilotos que sobresalen por encima del resto en el continente sudamericano, del que se erigen en presente y futuro: el argentino Leandro ‘Tati’ Mercado y el chileno Maxi Scheib.
En los últimos años, Mercado ha ido creciendo ligado siempre a Ducati, mientras que los éxitos de Scheib han llegado con BMW. Sin embargo, en 2017 ambos han firmado por Aprilia para llevar sendas RSV4, si bien lo harán en categorías diferentes. El futuro más inmediato del motociclismo sudamericano tendrá su base en Noale.
TATI MERCADO, A ESTABLECERSE EN SUPERBIKE
El argentino Leandro Mercado no pudo lograr en este 2016 repetir el éxito cosechado en 2014 en la Copa FIM de Superstock 1000, a la que retornó tras no encontrar acomodo en el Campeonato del Mundo de Superbike en el que tan buenas sensaciones dejó en su estreno con la Ducati Panigale del Barni Racing el pasado año, y en la que ha sido subcampeón por detrás del italiano Raffaele De Rosa.
Aun así, ha conseguido un asiento para volver a la máxima categoría entre las motos de serie. Mercado será el único integrante en la categoría del IodaRacing, que en este 2016 ha competido con Alex De Angelis y Lorenzo Savadori –ganador de STK1000 en 2015 y flamante fichaje del Milwaukee Aprilia-; y que en 2017 repartirá sus esfuerzos entre WSBK con Mercado y la nueva Supersport 300, donde competirán con el joven italiano Armando Pontone.
Al no tener compañero, las referencias para mercado serán las otras dos Aprilia RSV4, las del Milwaukee: el mencionado Savadori y, sobre todo, el retornado Eugene Laverty, que vuelve de MotoGP con aspiraciones de título. Para el Tati el título todavía parece ser algo lejano, pero a sus 25 años –los cumplirá justo antes del inicio de temporada- seguirá siendo de los más jóvenes de una categoría en la que aspira a establecerse de forma definitiva.
MAXI SCHEIB, A CONQUISTAR SUPERSTOCK
La irrupción del chileno Maximilian Scheib ha sido meteórica. Hace apenas dos años era un completo desconocido, y actualmente no hay un solo seguido del FIM CEV Repsol que no conozca su nombre. Scheib tiene el honor de haber sido de los pocos que han podido poner en aprietos a Carmelo Morales en el Campeonato de Europa de Superbike, del que se ha proclamado subcampeón venciendo las tres únicas carreras que dejó escapar el campeón.
El veinteañero Scheib, ya considerado por muchos como el mejor piloto de la historia de Chile, es claramente la gran esperanza de toda Sudamérica. Tras aparecer a finales de 2015 en el europeo de Superbike, este año ha vivido su consolidación definitiva, coronada con la victoria como invitado en la última carrera de la Copa FIM de Superstock 1000.
Una actuación que hizo que Aprilia se fijara en él y le ofreciese una RSV4 para disputar la temporada 2017 en el ahora llamado Campeonato de Europa de Superstock 1000 –que compaginará con el Campeonato de España de Velocidad-, donde no sólo tendrá el estatus de piloto oficial, sino la oportunidad de disputar dos rondas del Campeonato del Mundo de Superbike y dar el salto definitivo al mismo en 2018… donde precisamente podría coincidir con el Tati Mercado.