Puede parecer disparatado pensar que la firma italiana vuelve a la competición pero si tenemos en cuenta que el grupo chino Qianjiang compró Benelli en 2005, la cosa empieza a cobrar sentido. Sin embargo, únicamente el carenado de la moto correrá cargo de la mítica marca, ya que el resto de componentes serán Aprilia. Podría ser un primer paso del retorno de la marca a los cirucitos, ahora que cuenta con un respaldo pontente.
Los dos pilotos invitados encargados de domar estas curiosas máquinas, Wang Zhu e Lizeng Peng, estarán bajo la mirada de miles de espectadores y en sus manos estará la posibilidad de emular por un día las gestas que realizó Kel Carruthers para conseguir el Mundial de 250 en 1969. La moto que llevó a Carruthers a la victoria fue una Benelli de cuatro cilindros y cuatro tiempos –en la foto en blanco y negro -, que dista mucho de lo que podremos encontrar en la próxima cita del mundial. Pero una cosa es indudable: la expectación está asegurada.