MotoGP

Joan Mir recuerda a Luis Salom: “Desde ahí arriba estará orgulloso”

Recién coronado campeón del mundo de Moto3, Joan Mir ha reconocido que la victoria en Cataluña fue la más bonita y la de Phillip Island la más importante.

Chechu Lázaro

4 minutos

Joan Mir recuerda a Luis Salom: “Desde ahí arriba estará orgulloso”

¿Qué es lo primero que se te pasa por la cabeza un día así?

El campeonato que hemos hecho. Todavía no me lo creo. Estoy con la adrenalina baja y ahora mismo me puedes decir cualquier cosa fea que me da igual. Cuando tienes algo tan cerca, no ponerte nervioso y finalmente conseguir esto. Ahora mismo me quedaría dormido.

¿Has pasado miedo en la carrera?

Ha habido momentos que he pensado que si me quedaba donde estoy, no acababa la carrera. Iba quinto o sexto y había pilotos que cruzaban las trayectorias, y pensaba que alguno me tiraría. Se han caído dos personas delante de mí. He decidido ponerme delante a tirar, que tenía mejor ritmo y he conseguido abrir un pequeño hueco. Luego era cuestión de tirar, tirar y tirar. Se ha puesto a llover en mitad de la carrera y he dicho ‘no, por favor’. El señor me ha escuchado y ha parado. Luego se ha puesto a llover otra vez y he pensado, ‘pues ahora que llueva del todo’, y así ha sido. Me ha salido todo perfecto.

¿Eras consciente de que esto podía pasar?

Era uno de los factores, pero sobre todo quería liderar la carrera para minimizar riesgos e ir más cómodo.

¿Tenías claro de que iba a haber bandera roja?

Me quedaba la duda, sobre todo no quería que repitieran la carrera acortada a pocas vueltas.

¿Cómo cambias el chip de Japón a Australia?

Cuando me sale una carrera mala, la siguiente creo que la he ganado esta temporada. Después de Assen, llegamos a Sachsenring y gané también. No sé si es la rabia por lo mal que había ido Motegi… Aquí sí, ha sido por la rabia.

¿Empezaste el año ganando desde Qatar?

Todas las victorias son especiales, Qatar fue la primera, pero si me tengo que quedar con una victoria, digo Barcelona. Pasé tercer en la última vuelta y gané con un adelantamiento al final, y así sabe mejor. Además de que era una de las carreras de casa.

Y de tu vida, ¿con cuál te quedas Austria 2016 o Phillip Island 2017?

Me quedo con esta, porque viene con el título detrás y era decisiva. No hacía falta ganar la carrera, pero moralmente era muy importante porque veníamos de Japón. Por cómo hemos ido el fin de semana, creo que nos lo merecíamos. Teníamos un ritmo superior a los demás y en carrera se ha visto que en cuanto me ponía delante me escapaba. El ritmo es lo que me ha dado la carrera.

Todo empezó en Australia 2015…

Me acuerdo que cuando salí en el primer entrenamiento libre estaba último a 2 segundos del penúltimo. Me acuerdo que le dije a Dani Vadillo (su coach) que esto no era para mí. Pero seguí luchando, cogiendo toda la experiencia. Me acuerdo que iba detrás de Kent y se me caía la barbilla al suelo. Ser ahora campeón del mundo te da qué pensar al nivel que he llegado.

¿Te has sentido superior a tus rivales?

Ganaba una carrera y decía, ‘si gano la siguiente, sí que soy mejor que los demás’, y así he ido todas las carreras. Así han ido cayendo 9 victorias esta temporada.

Y como Valentino Rossi, ganando el título en tu segundo año.

Es un dato más. Pero poder compararme con él, ahora ni soñarlo. Al final, aunque tiene mucho mérito ser campeón, son categorías pequeñas. Pero que empiecen ya a preguntar, es una buena señal.

¿Cómo ha sido el encuentro con su padre y con su gente a pie de pista?

Lloviendo a mares, sin poder abrir la visera, con la visera con el vinilo de campeón. La cerraba y no veía nada. La abría, y tampoco. (Risas). Sensaciones… Buah, cuando he visto a mi padre me he puesto a llorar dentro del casco, ha sido una sensación que no puedes explicar hasta que no lo consigues. Sólo los que han conseguido un título saben la sensación que es. Soy un privilegiado.

¿Qué se han dicho?

No, no, no se dice nada. ‘¡Ua, eh, oh!’. No se dice nada, pero se dice todo.

¿Qué te ha pasado con la bandera de España en la vuelta de honor?

Se la ha tragado la rueda trasera. Me ha desaparecido. Sé que tenía que devolverla y me ha sabido mal.

¿Cómo imagina que se ha vivido en Mallorca?

Con nervios. Mi madre fue al Palma Arena en Japón. Pasó unos nervios tremendos y dijo que no volvía a ir, así que se ha quedado en casa.

El año pasado ibas con KTM y ahora con Honda. ¿También ha sido importante el cambio de moto?

Sí que ha sido importante. Y puede que decisivo, porque con la KTM tengo que decir que en las últimas carreras estábamos para ganar, pero no iba tan cómodo ni disfrutaba tanto como con esta. Y esta es la clave de ganar, de ir rápido. En todas, o prácticamente en todas las carreras de este año, he disfrutado como un enano. Estas dos carreras que vienen tengo ganas de hacerlas sin presión y a ver qué me sale. Si no me sale, pues mira, buenas noches, y me voy a dormir.

Vas a saltar a Moto2 con el mejor equipo, todo el mundo tiene muchas expectativas puestas en ti.

A ver, en teoría, sacando los números y las estadísticas tiene que ir bien. Yo, la verdad, me encuentro muy bien con la 600cc, voy muy rápido y disfrutar, disfruto muchísimo con la moto grande, derrapando. Con la pequeña no se puede hacer tan bestia. Y tengo unas ganas tremendas de que empiece el año que viene. Pero también tengo ganas de que acabe este y disfrutar lo máximo. Al final, un campeonato del mundo no se consigue todos los días, ni mucho menos. Quién sabe, dios quiera que no, si no es el último… ¡Toco madera para que no sea el último! Ya veremos.

¿Dedicatoria?

Sí. Puedo empezar y no acabamos... Mi padre, mi madre, mi familia, mis entrenadores, los dos, Dani y Tomás, y toda la gente que me ha ayudado a estar tranquilo y a veces a no pensar que soy piloto de motos y todas esas cosas, a disfrutar de una vida normal, de las pequeñas cosas, que son las que al final te llevas. Estas son las personas que están contigo siempre y se lo agradezco. Este título es para ellos y para la gente que también me apoya, porque cada vez tengo más seguidores y esto es una pasada. Espero que estén contentos y orgullosos.

¿Y Luis Salom?

Sí, también me acuerdo de él. Dije que si ganaba quería recordar a Luis, y menos mal que me he acordado, porque lo siento y lo sentía. Quiero recordar desde aquí a Luis. Que salga en las portadas si puede ser: 'Joan Mir recuerda a Luis'. Es totalmente cierto y también quiero mandarle un abrazo a su familia, a su madre y a su padre. Él no pudo conseguir un título, pero yo sí que he podido y seguro que desde ahí arriba está orgulloso.