Julián Simón subió este domingo a una Suster del equipo Laglisse en el circuito de Albacete, una vez terminada la cuarta prueba del Campeonato de España de Velocidad Buckler. El objetivo del piloto de Toledo era probar las sensaciones encima de una moto y ver la respuesta de su pierna derecha. Simón había sufrido una doble fractura de tibia y peroné el pasado 5 de junio en el Gran Premio de Catalunya.
La primera idea es que el piloto diera tan solo cinco vueltas al trazado, aunque al final la prueba, que comenzaba a las 6 de la tarde para intentar evitar el intenso calor, ha constado de 15 vueltas con muy buenos tiempos.
Julián Simón ha valorado positivamente este entrenamiento: “Volver a subir a una Moto2 ha sido fantástico, experimentar de nuevo las sensaciones tan bonitas que te da una moto, sobre todo después de lo mal que lo he pasado, ha sido fantástico. Tenía muchas dudas sobre cómo respondería la pierna en las curvas a derechas, pero el balance de esta prueba es muy positivo”.
El objetivo de este entrenamiento era determinar si estaría a punto para correr el próximo fin de semana en Sachsenring. Decisión que finalmente se tomará mañana tras un reconocimiento médico y con la opinio´n del doctor Villamor. Simón ha comentado que: “A nivel de fuerza y de capacidad de reacción sobre la moto estoy bien, a punto para correr. Me duele la pierna pero sé que deberé convivir con este dolor durante un tiempo”. “Lo importante es comprobar el estado de las fracturas, certificar que el callo es lo suficientemente sólido como para no tener complicaciones en caso de caída. Mañana lo decidiremos.”