No pintaba muy bien el Gran Premio para Yamaha cuando sus pilotos oficiales, Valentino Rossi y Maverick Viñales, se estrenaban en los entrenamientos libres del viernes. Aunque Valentino reconocía sentirse bien con la moto e indicaba que había estado lejos en la clasificación sólo porque no había montado neumáticos blandos, la situación de Maverick era distinta, afirmando haberse “perdido" probando una u otra cosa. Y a pesar de todo y después de haber sido séptimo en la Q2, Viñales ha conseguido hoy un tercer puesto con muy buen sabor, sobre todo por ser unos días tan especiales, “Increíble tener tres españoles en el podio, realmente muy especial. Ha sido difícil este fin de semana y poder dedicarle este podio ha sido increíble".
Respecto a la carrera, Viñales comentaba que, tal y como habíamos visto en las distintas sesiones, había sido un fin de semana muy difícil, “el fin de semana más difícil desde que estamos en Yamaha pero realmente hemos salvado los muebles y creo que hemos hecho una buena carrera porque luego en seco me he sentido muy bien, he ido cogiendo a los pilotos que tenía delante y me he sentido realmente cómodo girando".
El fin de semana más difícil desde que estoy en Yamaha.
¿A qué se ha debido ese cambio? Viñales no tuvo reparo en reconocer que habían intentando copiar la configuración de su compañero de equipo, Valentino Rossi, que había conseguido meterse en primera fila a sólo unas milésimas de Marc Márquez.
"Bueno, hemos cambiado el set-up y ha funcionado, Valentino ayer rodó rápido y hemos intentado copiar un poco el suyo y nos ha funcionado así que creo que es la base a seguir, sobre todo para mañana en los entrenamientos que tenemos y es importante retomar la confianza; mañana debemos intentar no hacer demasiadas pruebas y las pruebas que hagamos que mejoren…".
Hemos intentado copiar el setup de Valentino y ha funcionado.
Pero lo cierto es que la apuesta había sido arriesgada, puesto que no habían tenido tiempo de probar esa nueva configuración: “Hemos ido completamente a ciegas pues realmente nos lo hemos jugado todo en la carrera y ha funcionado, al final creo que si no he hecho la vuelta rápida he estado cerca y tenía un buen ritmo en seco, me ha sorprendido viendo que la pista no estaba seca ciento por ciento hacer 57.0, 57.1 que era el mismo ritmo que en el FP4 con la pista en buenas condiciones". Viendo el buen feeling con la moto, le preguntaban si tenía las mismas sensaciones que a principio de temporada:
"Sí. Sobre todo porque los puntos fuertes de la Yamaha volvían a ser los mismos que al principio de la temporada y eso me ha relajado mucho y me ha hecho pilotar bien y yo creo que es importante tener en mente este fin de semana que hemos pasado para que no vuelva a ocurrir".
Y es que estas últimas semanas han sido las más fáciles. “ Desde Mugello no estábamos en el podio y al principio de la temporada pensábamos estar en el podio en cada carrera. Así que esto nos hará fuertes y nos hará, sobre todo, ganar en mejor todo". Pero este fin de semana “he aprendido a sufrir, como he dicho siempre es importante no bajar la cabeza, estar motivado y cuando he visto la mínima oportunidad en parrilla he pensado que tenía que estar concentrado y dar el ciento por ciento hoy y estoy contento con eso porque seguramente el equipo se va a sentir mucho mejor".
En cuanto la forma re gestionar la carrera flag-to-flag, Viñales afirma que le hubiera gustado entrar una vuelta antes pero que “con tanta gente delante no podía pensar del todo bien, pero creo que hemos acertado en el cambio de moto al 50%". Marc lo ha clavado, nosotros entramos dos vueltas más tarde. Sobre la distancia con Marc opinaba, por cierto, que podría haber sido mucho peor hoy si la lluvia no hubiera parado.
Mañana, como en Honda, rodarán en busca de nuevas mejoras y sensaciones, un día que según Maverick “será súper importante y tendremos que estar atentos a los cambios que hacemos". En ese sentido, el de Yamaha aseguraba que si quisiera podría volver al chasis de principio de temporada, pero que es una decisión que es toma en conjunto. “Mañana es un día de probar bien y no mucho y perderse", sentenciaba.