Sin haber conseguido la satisfacción al sprint en toda la temporada Pecco Bagnaia llegó a su particular Hotel California: el Autódromo del Mugello, un lugar adorable en el que siente tan buenas vibraciones que, por momentos, parece convertirse en poco menos que un Iron Man.
En las carreras sprint anteriores había estado llamando a las puertas del cielo, mostrándose terriblemente rápido y rozando la gloria sabatina con la punta de los dedos, pero todavía no había encontrado lo que estaba buscando: la victoria. En Montmeló, después de haberlo hecho todo bien, se fue al suelo y el triunfo se le desvaneció como humo en el agua.
Ya en la previa del GP, como si estuviera perdiendo su religión, al ser preguntado por su déficit de puntos en las carreras cortas, prácticamente parecía gritar “¡Ayuda!”, clamando contra la mala suerte que le había acompañado en momentos puntuales y que confiaba en revertir para tener un día bonito ante su público.
Así sucedió: sentirse en casa encendió su fuego. Fue como si, al alinearse en la parrilla de la eterna recta del trazado transalpino, se dejase llevar por ese olor a espíritu adolescente que le retrotrae a esos circuitos de su país en los que comenzó a correr por pura diversión. Lo hizo y ganó, despejando de un plumazo todas las dudas de los meses anteriores.
No había tiempo para la fiesta ni para rockanrolear toda la noche, por mucho que Gene Simmons le hubiese enviado un mensaje deseándole buena suerte y pronosticando que probablemente ganaría el domingo. Bagnaia sabe bien que, cuando todos se alinean en el semáforo y se bajan la visera del casco, ya nada más importa.
Llegó el domingo y ya no importaba nada del ayer. Además, en lugar de ir de rojo, su Ducati lucía ‘azzurra’ en honor al color tradicionalmente usado por Italia en los deportes. Quizás a otro le hubiese afectado mentalmente ese cambio, pero él ya demostró estar por encima de cualquier superstición ganando de amarillo el año pasado ganando en Misano, así que se calzó sus zapatos de ante azul y se subió a la Desmosedici dispuesto a hacer lo que mejor sabe.
Y es que, por muy calmado que parezca, el turinés ya ha demostrado sobradamente que ha nacido para correr. Por eso tampoco se amilanó al verse quinto en la parrilla por una sanción de tres posiciones. La primera curva fue la bienvenida a la jungla. Ahí, al ver abrirse a Maverick Viñales, se coló por el pasillo para superar a Enea Bastianini, ponerse segundo y decirle a Jorge Martín: ‘Hey, Jude’.
Estaba en uno de esos momentos en los que, si se imagina algo, le sale. Así que se lanzó al interior del madrileño y le superó en la segunda curva. Desde ahí hasta el final, cada respiración que tomó iba encaminada a descontar tiempo entre él y la meta. Desde el máximo respeto a todos sus rivales, bajo el sol de la Toscana, Pecco Bagnaia se sentía invencible. Como un Rolling Stone.
Convertido en una auténtica estrella del rock, subió a lo más alto del podio bañado en la luz solar del amor que le profesaban todos los ‘tifosi’, sabiendo que había puesto otro ladrillo en el muro que está construyendo para trepar hasta su tercer título consecutivo; sumando 37 puntos que pueden ser de oro cuando llegue la lluvia de noviembre.
La temporada es muy larga y solo dios sabe lo que pasará en los próximos meses; pero si algo ha aprendido Bagnaia, es que para acabar coreando el ‘We are the champions’ a final de temporada, son fines de semana así los que van construyendo la escalera hacia el cielo de MotoGP.
Todas las negritas corresponden a 30 canciones históricas del rock. Son, en este orden:
- 1 (I Can’t Get No) Satisfaction – Rolling Stones
- 2 Hotel California – Eagles
- 3 Good vibrations – The Beach Boys
- 4 Iron Man – Black Sabbath
- 5 Knockin’ on heaven’s door – Guns N' Roses
- 6 I Still Haven't Found What I'm Looking For – U2
- 7 Smoke on the wáter – Deep Purple
- 8 Losing my religión – R.E.M.
- 9 Help! – The Beatles
- 10 Beautiful day – U2
- 11 Light my fire – The Doors
- 12 Smells like teen spirit – Nirvana
- 13 Rock and roll all nite – Kiss
- 14 Nothing else matters – Metallica
- 15 Yesterday – The Beatles
- 16 Superstition – Stevie Wonder
- 17 Blue suede shoes – Carl Perkins
- 18 Born to run – Bruce Springsteen
- 19 Welcome to the jungle – Guns N' Roses
- 20 Hey, Jude – The Beatles
- 21 Imagine – John Lennon
- 22 Every breath you take – The Police
- 23 Respect – Aretha Franklin
- 24 Like a Rolling Stone – Bob Dylan
- 25 Sunshine of your love – Cream
- 26 Another brick on the wall – Pink Floyd
- 27 November rain – Guns N' Roses
- 28 Only God know – The Beach Boys
- 29 We are the Champions – Queen
- 30 Stairway to Heaven – Led Zeppelin