La prensa internacional se reunió en el circuito de Zolder (Bélgica) para celebrar la segunda edición de la Semana Limpia, en la que se eligen los mejores vehículos eléctricos del año; un certamen que seguirá, al menos, hasta 2020.
Si la de 2010 pasó prácticamente desapercibida, pues estuvo dedicada exclusivamente a automóviles, la de 2011 ha servido para certificar que el transporte privado ecológico es una realidad palpable en todas sus vertientes. Decenas de modelos eléctricos, entre bicicletas, scooter, motos, coches y todo tipo de artilugios se dieron cita en Zolder. Sin duda, lo que más chocó fue ver un circuito abarrotado de pilotos y sus monturas rodando de forma silenciosa y sin humos.
Allí estuvieron prácticamente todas las marcas que han dado pasos firmes en el mundo de las motos eléctricas: desde las camperas Quantya, a las más asfálticas Zero, pasando por los scooter Vectrix o SYM... La oferta es más amplia de lo que podrías llegar a imaginar. Marcas que no te sonarán ahora (Govecs, iO, QvR, Vmoto, Noveco, Emco, Mavizen...), pero que en unos meses empezarán a resultarte familiares.
Motos eléctricas del año
La propia mecánica de la Semana Limpia Zolder 2020, implica una parte festiva (buen ambiente y convivencia), otra competitiva (los periodistas rodaron con todos los modelos en el circuito) y también de exhibición e información por parte de las propias marcas. Todo ello, con el objetivo de elegir los vehículos eléctricos más destacados. Después de toda clase de pruebas, el veredicto en materia de dos ruedas estuvo claro.
En la categoría de Moto Eléctrica del Año se eligió a la Zero S (9.995 euros), una naked de carretera con transmisión secundaria por correa, que tuvo una dura competencia con Quantya, que finalmente se alzó con el trofeo de Moto de Campo Eléctrica del año con su Evo 1 Track (7.950 euros).
El Scooter Eléctrico del Año es, cómo no, el Vectrix VX-1 Li (7.300 euros), ahora más ligero y autónomo (76 km reales) gracias a sus baterías de litio. Es, sin ningún género de dudas, la propuesta más seria y realista que hay ahora mismo en el mercado para quien esté buscando un vehículo utilitario de dos ruedas para poderlo utilizar cada día.
El título de Ciclomotor Eléctrico del Año fue para el Govecs GO! S 2.4 (5.656 euros), un scooter de funcionamiento suave, muy equilibrado, ligero y ágil y con una autonomía verifi cada de 85 km.
El problema del precio
Además de la escasez de puntos de recarga y la corta autonomía, el principal obstáculo que se encuentran las motos o scooter eléctricas es su precio de adquisición, que es muy alto: entre dos y tres veces el de un modelo equivalente con motor de combustión. Esta gran diferencia no compensa el ahorro que supone el consumo de electricidad frente al de gasolina.
Para que valiese realmente la pena optar por un modelo eléctrico su precio de venta debería ser, como mucho, 1,5 veces el de su homólogo con motor térmico. Esto todavía queda lejos, pero las grandes empresas y la administración (que compran flotas importantes de vehículos) harán que poco a poco su uso se vaya generalizando y su precio se irá abaratando. Además, en estos momentos, el Ministerio de Industria subvenciona el 25% del coste de las motocicletas eléctricas con velocidad máxima superior a 45 km/h y se solicita en el mismo momento de la compra. El concesionario autorizado se encarga de todo el papeleo. Los ciclomotores eléctricos, al menos por ahora, no tienen ayudas.
Si algo ha quedado claro en la Clean Week de Zolder es que la moto eléctrica no es cosa del futuro, sino del presente. La oferta ya es amplia y lo será más en los próximos meses. Estamos ansiosos por que llegue la edición 2012, en la que podría estar el E-Scooter de BMW y seguro que tendremos alguna otra sorpresa más.