El Stiggy Honda ha anunciado que su piloto John Hopkins estará al menos ocho semanas de baja, por lo que se perderá las tres últimas pruebas del Mundial de SBK que faltan para completar la temporada (Imola, Magny Cours y Portimao).
Hopkins se fue al suelo en la primera carrera de Nürburgring, cuando apenas se habían completado dos curvas. La caída fue dura y cuando estaba tendido en el asfalto le pasó una moto por encima.
Aunque la primera revisión realizada en el hospital más cercano al circuito no indicaba lesiones de gravedad, un chequeo más intensivo en Estados Unidos han revelado las consecuencias reales, es decir, traumatismo severo en la cabeza y lesiones de mayor o menor importancia en la muñeca, hombro y cadera.
El piloto anglo-americano ha sido intervenido con éxito en Estados Unidos, aunque ya sabe que no volverá a competir en ninguna prueba del Mundial en 2009, un año muy difícil para Hopkins ya que salió de MotoGP por la puerta de atrás por la retirada de Kawasaki y se perdió la mitad de temporada por otra lesión en Assen.
El equipo privado Stiggy Honda ha decidido no fichar a nadie para sustituir a Hopkins, por tanto, las últimas tres citas del Mundial las correrá con un solo piloto, Leon Haslam.
John Hopkins: “Regresé a Estados Unidos para hacerme un escáner de la cabeza, el hombro izquierdo, la muñeca derecha y la cadera. Mi médico encontró un fuerte golpe y un coágulo en el cerebro, aunque luego el neurólogo lo desmintió. Mi hombro tiene un tendón y un ligamento dañado que requiere una operación, igual que mi muñeca”.