Desde este mes de agosto seis empresas especializadas, en coordinación con los Ayuntamientos y a instancias de la Comunidad de Madrid, han ubicado en más de un centenar de localidades de toda la región estas ITV que irán modificando sus horarios y ritmo de inspección en función de la demanda, según el director general de Industria, Energía y Minas de la Comunidad de Madrid, Carlos López Jimeno.
"Hasta ahora sólo había 17 centros en otros tantos municipios por lo que esperamos que ahora los usuarios lo tengan mucho más fácil", dijo.
La inspección técnica de ciclomotores de dos ruedas es obligatoria por ley desde 2006, y deben pasarla todos aquellos vehículos de más de tres años de antigüedad, con una frecuencia bienal. En estas revisiones se comprueba el estado de la carrocería, el chasis, el alumbrado, los frenos, la dirección, los neumáticos o la transmisión.
Además, se ha incluido una novedad en este chequeo que consiste en la medición de las emisiones contaminantes, tanto del nivel de ruido como del contenido en monóxido de carbono de los gases de escape.
López Jimeno destacó que con este nuevo servicio la Comunidad da un paso importante en materia de seguridad vial, garantizando el buen estado del vehículo y haciendo más fácil al ciudadano cumplir con la obligación de la ITV. La Ley fija multas de 300 euros para los dueños de motocicletas que no hayan pasado la inspección.