El circuito de Portimao se convirtió en un banco de pruebas excepcional en el que probar las motos del Mundial de Superbike. El departamento de pruebas de MOTOCICLISMO, representado por Óscar Pena, se desplazó al sur de Portugal para realizar está espectacular toma de contacto con las motos derivadas de serie más potentes.
Los equipos Xerox Ducati, Ten Kate Honda, Yamaha Motor Italia y Kawasaki PSG-1 cedieron sus monturas a la prensa especializada para dar unas vueltas al trazado de Portimao. Sin embargo, y al contrario que otros años, la escudería Alstare Suzuki se negó en el último momento a ceder una de sus motos y por eso está ausente de esta comparativa.