Stefan Bradl cambiará de aires a partir de 2017. Después de saber que se quedaba sin hueco en MotoGP, el campeón del mundo de Moto2 ha puesto rumbo al campeonato del mundo de Superbike para encarar un nuevo reto en su carrera deportiva. Y es que a pesar de tener sólo 26 años, Stefan atesora una amplia experiencia en competiciones de primer nivel habiendo conseguido un podio junto al LCR Honda en Laguna Seca.
Aterrizará en las filas del Honda Ten Kate, donde formará equipo con el estadounidense Nicky Hayden, quien en 2017 esperaba tener una máquina lo suficientemente competitiva como para luchar por el título. Sin embargo, los rumores sobre esa nueva moto hablan de otra simple revisión de la máquina utilizada hasta ahora, lo que dejaría a Honda, de nuevo, un escalón por debajo de sus contrincantes.
Todo parece indicar ahora que Michael van der Mark, uno de los mayores talentos de la parrilla, pondrá rumbo al Pata Yamaha para correr junto a Alex Lowes. El equipo de los diapasones estaría así formando una de las escuadras más jóvenes y prometedoras del campeonato. Por su parte, Ducati confirmó tanto a Chaz Davies como a Marco Melandri y Kawasaki a Tom Sykes y Jonathan Rea. Se avecina un espectacular duelo de generaciones…
Stefan Bradl:
Estoy muy contento de unirme al Honda WorldSBK para la temporada de 2017. Es una gran oportunidad para mí, tengo muchas ganas de conocer a un equipo muy competitivo con el que podremos conseguir grandes logros. Por supuesto, será una experiencia totalmente nueva pero intentaré adaptarme tan rápido como pueda para conseguir pronto buenos resultados. No puedo esperar más para probar la Fireblade… y obviamente, será fantástico trabajar junto a Nicky; creo que será una combinación genial porque nos entendemos muy bien. Estoy súper motivado para encarar este nuevo viaje.
Será un viaje difícil para el joven alemán. En los últimos años la Fireblade no ha terminado de ir fina y sólo Jonathan Rea consiguió plantar cara a sus rivales, pilotos como Lowes o Rubén Xaus pasaron por la estructura holandesa con más pena que gloria.