La firma taiwanesa TGB ha conseguido desarrollar un GT de corte deportivo en el que se han contenido todo lo posible los costes de producción para poder ofrecerlo a un precio «de derribo».
Esta versión R además agudiza sus rasgos deportivos con una pantalla corta y tintada y la línea de las llantas, las costuras del asiento y las pinzas de freno en color rojo. La versión estándar es idéntica sólo que con el parabrisas alto y sin los «colores de guerra».
En su equipamiento encontramos bajo el asiento un enorme hueco para albergar dos cascos integrales, guantera o frenos de disco en ambos trenes. En marcha la postura de conducción es diferente, manillar alto plataforma baja y eso sí, mucho espacio en el asiento y respaldo para el conductor. Es perfectamente apto para dos personas, el pasajero cuenta con asideras y reposapiés extraíbles.
El precio sin duda constituye uno de sus mayores atractivos ya que ambas versiones se posicionan por debajo de la barrera psicológica de los 2.500 euros.
Lo mejor:
- Diseño
- Capacidad hueco
- Asiento
Lo peor:
- Agilidad
- Aceleración
- Pantalla poco protectora