La historia deportiva, y personal, de la piloto norteamericana Maria Forsberg ha sido cuanto menos curiosa, sobre todo en sus inicios. Y es que no todos los deportistas han tenido durante años un trabajo más convencional de lunes a viernes y han tenido tiempo para entrar y ganar carreras y competiciones los fines de semana. Esto es lo que le ha pasado a esta mujer cuyo nombre es uno de los grandes dentro de los campeonatos femeninos de enduro.
La mujer todoterreno
Hace una década, cuando empezaba a hacerse un hueco subida a una moto, Maria era electricista para la compañía Boeing. Sin embargo, los fines de semana se transformaba en una corredora mundial que incluso ha llegado a participar en los legendarios X Games Endurocross donde su nombre ha sonado en numerosas ocasiones en el podio para llevarse medallas de oro. Unos resultados que han sido durante años, sobre todo en sus comienzos, fruto de una fuerza de voluntad y un tesón admirables para poder entrar un rato cada día y sobre todo, durante el tiempo libre que le permitían los fines de semana.
Un parón en su carrera
Pese a que no llevaba mucho tiempo en activo como profesional, la estadounidense se retiró por un tiempo de las carreras de una manera más profesional en el año 2013 para dedicarse a su vida personal. Eso sí, hasta ese parón temporal, a Maria Forsberg le dio tiempo durante los años que estuvo encima de una moto a cosechar importantes victorias para su vitrina de premios.
Así, en ese tiempo se hizo con seis medallas de oro y de plata en los XG Enduro X en las seis ocasiones en las que ha participado; se ha llevado a casa cuatro campeonatos Grand National Cross Country WXC, así como el mismo número de títulos de WORCS Women's Pro y la mitad de medallas de oro ISDE. Premios todos ellos, algunos de ellos conseguidos incluso cuando trabajaba como electricista, que han convertido a Maria Forsberg en una de las mejores pilotos femeninas en la modalidad de enduro.
Después de convertirse en madre en el año 2014 y tras dedicarse durante un tiempo a su hijo, Maria Forsberg empezó a sentir de nuevo el gusanillo por volver a competir encima de una moto. Su bebé no había cumplido ni un año cuando la piloto volvió con energías renovadas para tomar la salida en los X Games Austin 2015. Era entonces su primera gran carrera de endurocross desde XG LA de la edición del 2013.
La rival de Laia Sanz
Si hay un nombre que durante estas temporadas le ha plantado cara a la campeona norteamericana esta no podía ser otra que la catalana Laia Sanz. Es más, incluso ha llegado a coronarse como la reina de X Games sobre dos ruedas en las ediciones en las que el triunfo se le ha escapado a Maria Forsberg. Como, por ejemplo, lo ocurrido en el año 2015 cuando se llevó la victoria tras una fantástica carrera en el Circuito de las Américas en Austin en la final femenina de Enduro X.
Este logro tuvo entonces un doble sabor dulce para Laia Sanz ya que se convirtió entonces en la única mujer piloto española que había ganado en esa modalidad del motociclismo; superando incluso a la gran Maria Forsberg, que ese día no mejoró de un sexto puesto en la general.