Años de competición los que tiene a sus espaldas, aún con su juventud, el piloto catalán Yago Domínguez. Y en este tiempo numerosas presencias en MOTO VERDE pues es de los que entiende que la presencia en medios resulta importantísima para cuidar a sus patrocinadores.
Por nuestra revista ha pasado Yago con casi todas las motos que ha tenido y con él hemos ido viendo su auge y su progresión. Con títulos nacionales y autonómicos en el enduro así como éxitos en cross, incluso tuvo un tiempo que se dedicó al supermotard/dirt track.
Completa formación que en 2020 tenía previsto seguir dando el salto al Nacional de Enduro de 125 así como realizando los Endurets en Cataluña en la categoría del «octavo de litro». Digo tenía porque entre lesiones y la parada en seco de la temporada endurera por la pandemia ciertamente poco se pudo competir y tanto él como su moto están a estreno.
Salto importante
Afrontar el paso de una 85 como la Yamaha YZ que usó el año pasado, en cross y enduro, a una 125, como la Sherco, resulta un salto destacado. Más tamaño de moto, muchas más prestaciones y, además, rivales cada vez más rápidos como el propio Yago. Por eso el 125 pide ya especialización y dedicación plena, centrándose ahora Domínguez exclusivamente en el enduro, haciendo algo de cross únicamente para entreno de coger velocidad y físico.
Preparación del motor
Entre las posibilidades de enduro 125 matriculables, Yago, y su padre Alfonso, han optado por Sherco, al contar también con la ayuda del preparador JRB, cuyo equipo está dedicado a la marca gala. Justamente JRB Racing Team, desde su sede en Cabrera de Mataró, Barcelona, se ha encargado de la preparación de la moto, además de aportarle asistencia en las carreras.
El escape artesanal confeccionado por JRB es una de las piezas más especiales
JRB ha trabajado el motor de las SE 125, que bien conoce, buscando llenarlo más además de aportarle un toque extra de potencia. La pieza más especial de esta moto es el escape, completamente artesanal, a la antigua usanza, con diseño del propio JRB que se complementa con el silenciador de serie. Modificación que se acompaña de los retoques «mágicos» de JRB en el grupo termodinámico, la carburación, le centralita, la válvula de escape… Y que reporta gran aumento de potencia/par.
Otro elemento destacado son los radiadores, reforzados por JRB, mientras que también se ha dedicado tiempo a la instalación eléctrica, simplificada, y con las botoneras recolocadas en zonas más seguras frente a los golpes (tras la pipa de la dirección). Curioso que tiene dos mandos de encendido y apagado/botón arranque, duplicado, con cableado en paralelo, por si se rompe uno poder rápidamente solucionar el problema conectando el otro. Esos detalles basados en la experiencia y que aseguran seguir en carrera.
Preparación del apartado ciclo
La otra gran modificación de esta moto llega en el apartado de la suspensión, gracias al partner técnico Andreani MHS que les sigue apoyando como hace ya varias temporadas. Por eso esta Sherco tiene material Öhlins, cartuchos TTX en el tren delantero sobre la base de la horquilla KYB de serie, y amortiguador TTX Flow, componentes ambos puestos a punto por el departamento técnico de Andreani MHS para las exigencias de Yago.
También los frenos se han potenciado con otro de sus partners técnicos como es NG, incorporando un disco delantero flotante, sobredimensionado a 270 mm, que tiene la singularidad de incluir personalización al llevar el nombre del piloto grabado. Detrás llega otro disco perforado, de 220 mm.
No faltan los accesorios de la empresa de casa, Diametral, la distribuidora de material que gestiona su padre Alfonso, encontrando por ello elementos Magura (manillar, puños...) junto a otros de la marca propia como la válvula del tapón de gasolina. Una de las últimas novedades ha sido la de fichar por la novísima marca de neumáticos Deli Tire, lanzada y diseñada por Rodi, la poderosa cadena de distribución de ruedas.
Robustez
Encontramos infinidad de detalles que jalonan la preparación de la moto encaminados a aumentar la fiabilidad, a facilitar las necesidades que pide el enduro, o a tener elementos con los que responder a un posible fallo de la moto, como el llevar fusibles dentro de la caja del filtro.
Sí que hemos visto que, a diferencia de su época en 85, en la que tanto en la Husqvarna como en la Yamaha que tenía llevaba recambio/herramienta alojados en la caja del filtro -su padre era el que diseñaba la colocación y su fijación-, para no cargar peso el piloto, ahora Yago transporta todo el material en una riñonera de «adulto» como corresponde a su edad y a su categoría.
40 más
En las sensacionales instalaciones de Zona de motor l'Ametlla Park, otro de sus patrocinadores, brillantemente gestionadas por Albert Esteban, hemos podido hacer el test de esta moto. Pasar de una moto de 85 cc a uno de 125 cc supone un aumento de 40 cc, cifra que implica mucho más que ese incremento. Sobre todo porque hay un cambio en el tamaño de la moto, ya son tallas estándar de adultos y el volumen aumenta de forma considerable.
Charlando con Yago nos decía que «la altura es uno de los hándicaps respecto a la 85, en la que llegaba sobrado con los pies al suelo. En esta 125 llego de puntillas. No he rebajado asiento ni nada para no modificar el puesto de conducción. Para motocross no importa pero para extremas o trialeras sí lo noto bastante, pero me adapto, además de que sigo creciendo. En marcha, desde que comencé con la moto me sentí muy cómodo. No es una muy pesada, ni muy grande, es manejable y la puedo llevar como una 85».
La Sherco muestra una impecable imagen -siempre los Domínguez cuidan los detalles- con una decoración realizada por DEF Graphics en la que no queda hueco para mucho más sponsor. Esta vez solo tienen una moto para correr y entrenar por lo que la tienen que cuidar al máximo, rodando en cronos, en tramos, en pistas de cross, zonas extremas…
El motor de la Sherco destaca por su buena respuesta en bajos gracias a un cambio de escalonamiento de cerrado
Hablando del motor, Yago apunta que «pronto se nota el salto a 125 al tener un motor que corre mucho más que una 85 y, este además, también más que la Sherco de serie. Lo que más me gusta frente a otras 125 que he podido probar es que la mía tiene muchos más bajos y sube muy rápido de vueltas. Encuentro una curva de potencia llena. El motor estira lineal y arriba no asusta. Claro que frente a algunas de cross le puede faltar algo. Pero compito en enduro y para esto es muy buena. Principalmente por lo que ayuda. Me está haciendo muy fácil el salto de categoría y me permite ganar confianza».
Gracias también, como nos indica Domínguez, al acertado escalonamiento del cambio que complementa los bajos extra logrados en el motor: «tiene marchas muy cortas, hay escalonamiento cerrado y, por eso, dando gas y en aceleración, hay que meterlas muy seguidas. El selector del cambio es muy suave, que es bueno pero hay que estar atento también para no meter marcha sin querer. El embrague me gusta, va todo bien, y no lo he fatigado hasta el momento». Y no olvida Yago algo que ahora tiene que le facilita la vida como es el arranque eléctrico «sensacional, muy útil y práctico. Cuando no lo tienes no le das valor pero con él, hasta arriesgas más porque en caídas arrancas más deprisa».
En cuanto a la parte ciclo lo primero que nota y destaca Yago es que «la rueda grande de la 125 se lo traga todo, mucho mejor que en la 85, y los impactos son menores. Por eso también puedes ir más rápido y la velocidad en todo aumenta de forma notable. Y es en lo que tengo que trabajar más, en ganar velocidad y paso por curva. En las entradas a curva la Sherco es mucho más estable y se puede entrar muy rápido. Diría que es híper segura y muy aplomada. Y con neumáticos anchos, sobre todo con el 140 trasero, noto que se puede entrar muy fuerte. Hay mucho más agarre y no se mueve del sitio de la moto».
Ahondado en el chasis Yago le encuentra «perfecto, va muy bien por lo ya dicho de la sensacional que pisa delante. Pero además, la SE me parece manejable. En cronos de curvas cerradas entra bien y la coloco con facilidad. Tengo que ganar más confianza y por eso tampoco andamos cambiando muchos reglajes como jugar con la distancia entre ejes. Respecto a la 85 sí que noto que en troncos muy juntos es más larga y hay que ir a ritmo pues no entra».
Otra pieza estrella de esta SE 125, la amortiguación Öhlins, juega un papel destacado en el rendimiento de la unidad de Yago. «Es donde más ha cambiado la moto, incluso diría que por encima del motor. Traga mejor y aploma más. Eso sí, tengo un setting blando, absorbente, que copie mucho, como a mí siempre me ha gustado. Incluso puede que demasiado blando. Si voy a un circuito de motocross sí toco reglajes mediante los clicks. Pero para enduro ya va bien. Me gusta sentir cómo pisa el suelo y la información que me transmite. Importante el tacto siempre igual que mantiene, incluso cuando se le mete mucha caña no hay desfallecimiento alguno».
Una afirmación que también traslada a los frenos que «responden de lujo, con una potencia sensacional gracias al material NG y al tamaño extra del disco delantero. De momento tengo de sobra y seguro que también me ayudan a ir cada vez más deprisa pues me aportan la confianza de saber que cuando lo necesito detengo la moto como quiero».
En auge se mantiene Yago Domínguez con esta SE 125 que le está permitiendo seguir progresando en su pilotaje aunque, de momento, los resultados no hayan llegado al no poder competir. Pero esperando tener la buena suerte para ganar y volver a sumar títulos -en la moto lleva un tornillo como amuleto que lo tuvo en su mano cuando le operaron para fijar una lesión-.