Con la única condición de ir sobre una Impala, la ruta permite disfrutar de bonitos paisajes a ritmo tranquilo, siempre rodeados del característico buen ambiente de los impaleros de las más diversas condiciones.
La organización del Moto Club Impala suele cuidar todos los detalles, desde la señalización de la ruta hasta la comida final con sorteo lleno de regalos moteros. Por eso, la Impalada es una fecha esperada que acaba reuniendo unos dos centenares de motos casi idénticas, un buen espectáculo por donde quiera que pase.
Adelantándose ligeramente a las fechas habituales, este año la Impalada se realizará el sábado 31 de mayo. La salida, como los últimos dos años, tendrá lugar desde las fuentes de Montjuïc de Barcelona, mientras la llegada será en Lloret, después de recorrer magníficas carreteras con vistas al mar.