Las motos, como otros vehículos, necesitan utilizar energía eléctrica de forma correcta para que puedan funcionar. En este sentido, el regulador de la moto, constituye una pieza muy importante para que este proceso se lleve a cabo con efectividad.
A continuación, resumiremos en qué consiste esta pieza, llamada también rectificador y cuál es su funcionamiento.
¿Qué es el regulador de la moto?
Es un dispositivo eléctrico, conocido también como rectificador, encargado de regular la corriente que recibe la moto a través del alternador, para suministrarla de forma segura y sin altos niveles de tensión a todos los componentes eléctricos de la moto.
Función del regulador de tu moto
Tu moto funciona correctamente gracias a la corriente continua, sin embargo, el alternador suministra la energía en forma de corriente alterna, por lo que necesita ser convertida. Esta conversión es realizada por el regulador de tu moto, conocido también como rectificador de corriente.
Es decir, el alternador tiene la función de equilibrar el voltaje según la demanda de electricidad (entre 12 y 14 voltios) en las distintas piezas de tu moto y su sistema eléctrico, y posteriormente almacenarla en la batería.
Este elemento se encuentra debajo del sillín del piloto, y está confeccionado en aluminio para disipar el calor. En caso de que el regulador presente fallos, ocasionará averías importantes en tu moto, afectando gravemente a su correcto funcionamiento.
Averías ocasionadas por los fallos en el regulador de tu moto
Dentro de las principales consecuencias de que el regulador de la moto presente averías, se encuentran las siguientes:
La pista en las bombillas
Esta aplica solo para las motos antiguas, y en ese caso, cuando se verifica un fallo en el regulador por pasar mayor voltaje del debido, ocasiona que las bombillas se averiaran muy rápido.
Fusibles dañados antes de su vida útil
Este caso se presenta en las motos modernas, porque cuentan con una protección en las bombillas contra los picos de tensión en el caso de que el regulador falle, originando que se tenga que sustituir los fusibles con frecuencia.
Mal funcionamiento del motor
Si el motor no arranca o lo hace de forma deficiente, puede deberse a algún fallo en el regulador por falta de suficiente corriente, lo cual está impidiendo que se genere la chispa y mezcla del propulsor, ocasionando los llamados tirones del motor.
La batería abultada
Si el regulador está fallando, puede ocasionar graves daños en la batería, por el exceso de voltaje o tensión, lo que hará que el agua de dentro se expanda y en consecuencia, se abulte la batería.
La batería no carga correctamente
En caso contrario, cuando el regulador genere menos tensión de la necesaria, ocasionará que la batería no se cargue correctamente, impidiendo la marcha de la motocicleta.
Fallos de los sensores
El voltaje incorrecto o tensión insuficiente del regulador, puede provocar que los sensores no cumplan su función, generando lecturas incorrectas.
El regulador de la moto es una de las piezas más importantes del sistema eléctrico, con lo que siempre debe estar en perfecto estado y, en caso contrario, deberás llevar tu moto al taller cuanto antes.