KYMCO ya había flirteado anteriormente con modelos de tres ruedas en el pasado, incluso con una versión similar a este nuevo CV3, pero parece que en esta ocasión se va a convertir en un modelo definitivo, el primero de la marca, que en contraposición con lo que es habitual no se posiciona en un segmento medio sino en un nivel superior de prestaciones.
El propulsor del nuevo KYMCO CV3 es similar al que utiliza el AK550, un bicilíndrico en paralelo que dispone de más de 50 CV de potencia, lo que asegura unas elevadas prestaciones y suavidad de marcha gracias a su embrague multidisco. La transmisión secundaria se efectúa por medio de una correa, con un basculante doble de aluminio y un amortiguador central.
Gran capacidad
La estructura del bastidor es nueva, con un sistema de suspensión delantera y dirección en el KYMCO CV3 que recuerda el de los Yamaha Tricity, ya que está dotado de una doble horquilla telescópica en cada rueda y un paralelogramo deformable en la parte superior. A diferencia de los modelos japoneses, el bloqueo de la inclinación está confiado a un par de hidráulicos telescópicos colocados por delante de las horquillas.
Otra de sus peculiaridades es su gran tamaño, especialmente el dedicado al pasaje, ya que cuenta con una estructura exterior de soporte que permitirá una amplia capacidad bajo los asientos. Se ha dividido el espacio del conductor y del pasajero, cada uno con sus correspondientes respaldos, y además se ofrece la posibilidad de equipar maleras y un baúl, de manera que se convierta en un scooter de gran turismo.