El KYMCO KRV en principio no será un modelo que llegué a España debido a su cilindrada, 175 cc, un cubicaje habitual en Oriente, pero que no casa con la legislación europea, que tiene en los modelos de 125 cc el límite para ser conducidos con el carnet de coche y el A1, y que encuadra a los modelos más pequeños y ciudadanos.
La principal distinción de este modelo es el hecho de haber situado el motor en la parte trasera del chasis sin que bascule con la rueda, sino que se mantenga fijo en el chasis. La rueda trasera está sujeta por un basculante convencional de dos brazos y la transmisión se efectúa por medio de una correa dentada.

Compacto
Las dimensiones del KYMCO KRV son similares a las de los modelos pequeños de nuestro mercado, con llantas de 13” y neumáticos de 120 mm y 130 mm de anchura y dos grandes discos de freno. Su equipamiento se complementa con un sistema ABS, control de tracción cuadro digital, toma USB e iluminación LED, además del sistema de encendido con llave electrónica.
Otra característica es su chasis tubular que discurre por la parte inferior, permitiéndole dispone de una plataforma plana que aumenta su capacidad de carga, que queda complementada con el hueco bajo el asiento en el que cabe un casco integral.
