Opinión

Qatar ya no derrocha

De un tiempo a esta parte, los dirigentes qataríes han pasado despilfarrar dinero en su Gran Premio a mirar cualquier inversión con lupa.

Chechu Lázaro

2 minutos

Qatar ya no derrocha

El "skyline" en Doha, capital de Qatar, se renueva cada año.

Teniendo en cuenta que Qatar se prepara para acoger el Mundial de Fútbol en 2022 y que el paisaje habitual lo forman una nube de grúas que levantan instalaciones, carreteras y hasta un monorraíl que unirá todo el país… lo de que no malgastan sus petrodólares es discutible. Cada año el camino del hotel al circuito es diferente y lo normal en el viaje de ida de los jueves es perder bastante tiempo en reaprender el camino. Con decirte que el año pasado, en las dos semanas entre el test y el fin de semana del GP se había construido una nueva carretera provisional para unir en coche los 25 km que separan Doha de Losail.

La capital del emirato poco se parece a la que acogió su primer GP en 2004 y su flamante “skyline” se renueva a ritmo de MotoGP con rascacielos de nueva construcción que un año antes era solo un socavón. Como sus vecinos, Qatar vive en la opulencia y un derroche que a veces puede parecer obsceno.

El "skyline" en Doha, capital de Qatar, se renueva cada año.

MotoGP ya ha visto como la lluvia alteraba los planes durante un Gran Premio.

Recuerdo el año pasado, con la cancelación de los entrenamientos cronometrados, los aficionados hicieron volar su imaginación. Algunos propusieron techar el circuito para disputar el primer GP de la historia “indoor”; otros pedían construir uno nuevo con sistema de drenaje “made in Assen”. Será por dinero, decían... Sin embargo, algo está cambiando en Qatar.

Ya el año pasado me contaba Juan Baquero, director del circuito de Qatar, que los dirigentes tienen la sensación de que se han aprovechado de ellos desde aterrizo el Mundial de MotoGP en 2004. Así que han pasado despilfarrar dinero a mirar cualquier inversión con lupa. Baquero bromeaba entonces con su mala suerte: “Llegué a Jerez y el circuito estaba en suspensión de pagos. Lo cambio por Qatar pensando que el dinero no sería problema, y tampoco”. El gaditano fue fichado para rentabilizar unas instalaciones que han pasado de tener 28 días de ocupación a más de 180 y ha sabido ganarse la confianza de las autoridades.

MotoGP ya ha visto como la lluvia alteraba los planes durante un Gran Premio.

Cuando en 2009 se aplazó la carrera de MotoGP al lunes por otra inoportuna tormenta del desierto, los gastos logísticos de los equipos y de las televisiones (cambio de vuelos, noches de hotel, etc.) corrieron a cargo del Emir de Qatar. El año pasado, cuando la suspensión rondaba en el aire, los presupuestos de los equipos temblaban pensando en el aplazamiento al lunes, que para muchos equipos, especialmente de Moto3 y Moto2, hubiera sido inviable. Y es que, los petrodólares qataríes que tantas “fiestas” pagaron en el pasado ya no son lo que era.