Carretera

Kawasaki ZX-10R Regis Laconi

Prueba de la moto oficial del equipo Kawasaki PSG-1 del Mundial SBK. En esta última entrega de las motos del Mundial de Superbike probamos la poderosa Kawasaki ZX-10 R del equipo PSG-1 pilotada por Regis Laconi. Es la quinta en discordia.

Óscar Pena / Fotos: FG Sport/Mikael Helsing

3 minutos

Kawasaki ZX-10R Regis Laconi

Las dos ZX-10 R del equipo PSG-1 son motos «oficiales» que no terminan de cosechar los éxitos que de ellas se esperan. Y es que el francés Regis Laconi y el japonés Makoto Tamada, dos pilotos muy experimentados y de contrastadas cualidades, han estado lejos de las posiciones de cabeza en el Mundial que acaba de terminar. Una situación que desde luego no debe gustar mucho al dueño del equipo, Pierguido Pagani, que a buen seguro confiaba ciegamente en Kawasaki cuando allá por 2006 hizo de su equipo el oficial de la marca verde y fichó a Chris Walker para llevar la ZX-10 R a lo más alto del podio.

Domar a la bestia

Desde entonces ha llovido mucho, y han tratado de domar a las siempre agresivas Kawasaki pilotos como nuestro Fonsi Nieto en 2007, o los actuales Laconi y Tamada.

Tuvimos ocasión de probar la ZX-10 R del español en el circuito de Valencia, y ahora hacemos lo propio en Portimao (ver en números anteriores de MOTOCICLISMO el resto de protagonistas) con la versión 2008, que como sabéis es una moto completamente nueva. Comparado con aquella, la actual es mucho más pequeña y manejable. No tan voluminosa ni alta, es una moto similar en posición de conducción y comportamiento al del resto de las motos japonesas integrantes de la parrilla. Eso sí, con la particularidad de llevar un incómodo suplemento en la silleta que realmente merma tus movimientos, aunque es imprescindible para el piloto francés debido a una lesión de espalda que arrastra.

A sus mandos cargas bastante peso delante y se nota cómo a Laconi le gusta conducir sintiendo lo que hace la rueda anterior. Los reglajes de la horquilla Öhlins presurizada no son excesivamente duros, y los hidráulicos trabajan para permitir una rápida entrada en curva aprovechando al máximo la adherencia de los slick Pirelli. Además es mucho más fácil de mover de un lado a otro que su predecesora. Mucho menos física, a la postre se revela más efectiva y rápida que la moto con la que Fonsi estuvo luchando toda una temporada.

Los problemas llegan a la hora de «dar gas», y es en esta operación donde la Kawasaki ZX-10 R parece quedar algo descolgada con respecto a sus competidoras y te hace sentir un jinete a lomos de un caballo desbocado. El amortiguador, basculante y neumático trasero se ven obligados a soportar unos esfuerzos extremos como consecuencia de la brusquedad con la que se entrega la potencia en el primer golpe de gas. Es por ello que percibes más movimientos e inestabilidad, obligando al control de tracción a trabajar con mayor brusquedad.

Akira

Por lo visto, las mejoras parecen tener que centrarse más en la electrónica de la moto que en las prestaciones del propulsor propiamente dicho. La primera corre a cargo de Magneti Marelli, como en otras protagonistas de la contienda (Ducati, Yamaha y Suzuki), y el reto es ser capaz de transmitir con mayor suavidad toda la potencia del cuatro cilindros en línea a la rueda. Hasta que esto ocurra, la Kawasaki va a seguir siendo la moto más exigente con el piloto. En el misil verde la puesta a punto del chasis y de las suspensiones es un poco comprometida. Y es que con la moto inclinada la dureza con la que se transmite la potencia limita la conducción lo suficiente como para que el resto de rivales se escapen ligeramente.

Por su parte, el propulsor lo evoluciona el conocido preparador francés Akira. Con alrededor de 210 CV de potencia máxima cuando el Ram Air está trabajando a pleno rendimiento, no hace falta más potencia para rodar al ritmo de sus competidoras. No obstante, sí da la sensación de tener un comportamiento algo diferente. Así, tiene una barbaridad de bajos y medios, perdiendo un poquito de fuelle en lo más alto del cuentavueltas. En las curvas rápidas del circuito portugués, como la de entrada a meta, impresionaba, e incluso parecía superior a sus rivales, cuando te atrevías a acelerar a fondo sin llegar a exprimir cada marcha para evitar que la rueda delantera se levantase del suelo más de la cuenta. Sin embargo, el par lo entrega un poco como «a trompicones», con picos en toda la curva. Y por otro lado, a final de recta, con la sexta velocidad engranada y aguantando la presión del viento a casi 300 km/h de velocidad máxima, parecía que en la Honda o la Yamaha llegabas más rápido a la bajada en que has de echar mano de los frenos, tan buenos en esta Kawasaki como en aquellas.

Sin duda todo esto tiene la «excusa» de que la moto es nueva, y ya se sabe que cuesta ponerla a la altura de rivales más «trabajadas» el primer año. Pero la Honda CBR 1000 RR del equipo Ten Kate tenía una desventaja similar y ha achacado menos problemas de juventud.

2009

Hasta aquí ha llegado la serie de las motos del Mundial de Superbike, con la destacada ausencia como sabéis de la Suzuki GSX-R 1000. La próxima temporada a las cinco marcas implicadas este año se suman Aprilia y BMW, que no vienen precisamente para ser meras comparsas… Kawasaki tiene que emplearse al máximo durante el invierno y aprovechar toda la experiencia acumulada para colocar a su ZX-10 R donde se merece. El espíritu de la Ninja es guerrero y sólo la victoria puede ser su objetivo.