Custom

Kawasaki VN Vulcan 1700 Voyager

Análisis de la nueva rutera custom de Kawasaki. Siguiendo con una saga que tenía casi en el olvido, Kawasaki presentará en el próximo Salón de Colonia la nueva Vulcan 1700 Voyager. Ahora con aspecto y motor de orientación custom, la «Viajera» de Kawasaki va a hacer que el mundo sea más pequeño…

Guillermo Artola / Fotos: Kawasaki América

2 minutos

Kawasaki VN Vulcan 1700 Voyager

A partir del nacimiento de las Vulcan de mayor cilindrada, las VN 1500 Tourer de 1998 fueron las primeras «españolas» (partiendo de la Vulcan 1500 custom sin accesorios turísticos y llamada Sumo en el mercado americano), siempre ha existido una versión Tourer dotada de maletas y un parabrisas más o menos grande aunque no demasiado envolvente. Aquí podría establecerse el primer antecedente customtourer de la marca, que luego llegó a los 1.600 cc con un pequeño aumento de diámetro de pistones.

En cuanto a nombre se refiere, la primera Voyager nació en 1986 decididamente dedicada al mercado yankee pero con una base técnica totalmente distinta de la que nos ocupa. Aquella era una cuatro cilindros en línea de 1.200 cc con ruedas de 16” y bastidor de tubo de acero, pero con formas de moto convencional y no tan decididamente americana (el diseño se basaba claramente en las Z 900 y Z 1000 de la época).

Acompañando a las fotos del resto de la gama VN 1700 puedes encontrar una de la Voyager cuatro cilindros que prácticamente no cambió durante su larga vida. Nunca llegó en importaciones oficiales a los mercados europeos, y tuvo que pelearse con las competidoras japonesas que en aquella época eran las destinadas a los viajeros impenitentes de los USA, pues las Harley-Davidson de esos años no eran lo absolutamente fiables que hoy son y se destinaban a utilizaciones más limitadas. Honda Gold Wing cuatro cilindros boxer, Yamana Venture cuatro en «V» y Suzuki Cavalcade eran los aparatos de los viajeros «Coast to coast» y aquí la Voyager se defendió sin problemas y tuvo un gran éxito. Hoy Kawasaki ha decidido pelearse en aquellas tierras con un modelo dentro de los cánones imperantes en los dominios de Bush, y así nace la Voyager actual y sus hermanas de camada.

Llaman la atención, dentro del equipamiento que ofrece, los sistemas K-ACT de frenada compensada y un avanzadísimo sistema de acelerador electrónico con mando de apertura y cierre de las mariposas gobernado por la ECU y con inyección de última generación que hace posible la instalación del sistema de control de ralentí y el control de crucero (incluso sería posible y relativamente sencillo disponer de control de tracción, que en este tipo de motos no tiene sentido). Las formas, como en toda custom que se precie son retro, con curvas ampulosas y un carenado decididamente americano, con instrumentación de aspecto años sesenta y con maletas y top case a juego en color y morfología. La preinstalación de radio permite la conexión de un iPod y, por último, está disponible como opción un moderno ABS.

El conocimiento exhaustivo que ya tenemos de las Vulcan Tourer anteriores y de la VN 2000 de la que se deriva el motor de la Voyager nos permite asegurar que ésta va a ser una moto manejable para sus medidas, cómoda como la que más y con un agradable e interminable propulsor que parece no tener fin ni por arriba ni por abajo (de la escala del cuentarrevoluciones). Sólo unos meses nos separan de poder probarla para contarte más, y no dudes que en cuanto una Voyager arranque dentro de la piel de toro, tú lo sabrás y con todo detalle…