El Cyclone RT2 tiene un perfil similar al de su hermano de 125 cc (Cyclone RT1), pero sube un escalón en cuanto a posibilidades fuera de la urbe ya que equipa un motor de 289 cc y unas cotas de potencia máxima de 24 CV a 7.000 rpm y 24,5 Nm a 6.750 rpm.
Para ser un trescientos, noté una salida algo más perezosa del motor, pero que estiraba mucho más y, en comparación su hermana de cilindrada también corría algo más. Quizás fuera la diferencia de peso o por las propias unidades a las que me subí, pero sí que era más alegre la respuesta en este Cyclone RT2 que en el RT3S.
Un modelo que me pareció el más equilibrado de la gama de scooter del fabricante chino, muy apto para la ciudad y el extrarradio, con una buena ergonomía, con pantalla regulable en altura y, esta vez sí, espacio para un casco integral debajo del asiento.
En cuanto al equipamiento: cámara HD delantera y trasera que graba en cuando lo pones en marcha, llave de proximidad, control de tracción, pantalla LCD, toma USB-C e iluminación full LED, piñas retroiluminadas y una gran pantalla TFT con conectividad y sistema Mirror Link para replicar la pantalla de tu smartphone en el cuadro, con un precio de 3.895 euros.