A las 11:01 hora peninsular española Marc Márquez ponía fin a 9 meses de inactividad subiéndose de nuevo a su Honda RC213V. 265 días después de la caída de Jerez y con tres operaciones en su húmero, el piloto de Cervera volvía a completar un entrenamiento oficial del Mundial de MotoGP.
Toda la expectación estaban en el box del #93, donde se agolpaban televisiones y fotógrafos para captar el momento en el que Marc se volvía a acoplar en su Honda. El asfalto de Portimao no estaba en las mejores condiciones, ya que la lluvia de la noche había dejado varios parches de agua sobre el asfalto, así que tocaba ser prudente, al menos en esas primeras vueltas.
Márquez hizo una primera tanda de 7 vueltas, y descontando la de salida y vuelta a boxes, 5 vueltas lanzadas en las que ya se situaba en la parte alta de la tabla. Pero lo mejor estaba por llegar. Después de parar en boxes para tomarse un respiro, volvió a pista a falta de 10 minutos, y ahí sí que sacó a relucir todo su talento.
Otras 7 vueltas consecutivas y un último giro dándolo todo para acabar con un tiempo de 1'42.378. Tercero a escasas 251 milésimas del mejor tiempo de Álex Rins. Sólo el piloto de Suzuki y Maverick Viñales finalizaron por delante; mientras que su compañero de equipo, Pol Espargaró, se situó a la zaga.
Los tiempos de vuelta todavía han sido lentos, comparado con el récord del circuito (1'39.855), pero lo importante es que Marc Márquez ha estado al nivel de los mejores. Y todavía tendrá por delante el FP2 de MotoGP para confirmar sus sensaciones. Lo que está claro es que el Jefe ha vuelto.
Clasificación entrenamiento libre 1 (FP1). Gran Premio de Portugal 2021