Cuando hace apenas dos meses Yamaha anunció que ni correría en el próximo Dakar 2023 ni participaría en el Campeonato del Mundo de Rallies Cross-Country de la FIM, muchos aficionados no podían creer lo que leían, ya que la firma japonesa ha sido una de las fijas en el rally más famoso del mundo.
No en vano, suyas fueron las primeras victorias en la categoría de motos, y no solo eso, hay algunos modelos que han dejado huella en los amantes del off road, con lo que resulta complicado de asumir. Y no es de extrañar, ya que la trayectoria de la marca de los tres diapasones ha tenido momentos memorables en tierras africanas primero, y americanas y asiáticas después.
Las victorias de Yamaha en el Dakar
Así las cosas, hay que apuntar que Yamaha protagonizó dos etapas que han quedado en el recuerdo por lo significativo de ambas. Para hablar de la primera de ellas hay que remontarse a los albores de la prueba, cuando un grupo de aventureros recogieron el guante lanzado por Thierry Sabine y se embarcaron en un rally que no tardaría en convertirse en legendario. Pues bien, el primer piloto de motos que fue capaz de llegar a la capital senegalesa en menor tiempo que ningún otro fue Cyril Neveu, y lo hizo en las dos primeras ediciones a lomos de una Yamaha XT 500, una moto que marcó un auténtico hito y que tuvo numerosas ventas en el mercado. Y es que había muchos aficionados que querían emular las aventuras que los grandes pilotos tenían en el Sahara.
Al año siguiente, Neveu revalidó su título con esta misma moto, la cual acaparó las cuatro primeras posiciones en el raid y además marcó un antes y un después en la concepción de este tipo de motocicletas.
Las victorias de Peterhansel
Después de los triunfos en los años 1979 y 1980 transcurrió más de una década para que otra Yamaha llegara al Lago Rosa en primera posición. Fue en 1991 y llevó la firma de un joven francés que no tardaría demasiado en convertirse en una leyenda de este rally. A fin de cuentas Stéphane Peterhansel es conocido como Monsieur Dakar.
Lo hizo sobre una Yamaha YZE750T que había llegado para dominar. No en vano, las tres plazas del podio correspondieron a pilotos que la conducían. La historia se repitió en 1992, con Peterhansel cada vez más superior a sus rivales y con la nueva Yamaha YZE850T, aún más determinante que su antecesora. Tanto fue así que con ella se ganaron seis Dakar, cinco de ellos para Peterhansel y uno para Edi Orioli. Solo el propio Orioli pudo romper ese dominio en 1994 con la Cagiva Elefant 900.
La última gran cabalgada de esa Yamaha la protagonizó el invencible francés, manteniendo a raya a las nuevas KTM que ya venían avisando de que el futuro iba a ser suyo casi por completo. Desde la victoria de Monsieur Dakar ninguna otra Yamaha ha logrado el título y los mejores resultados fueron varios terceros puestos. A partir del año que viene, no se volverán a ver los tres diapasones en las arenas de Arabia. En total, Yamaha cosechó nueve primeros puestos, nueve segundos y diez terceros.