La semana pasada fuimos citados por Kymco en las instalaciones del I.N.T.A. de Madrid, para poder comprobar las mejoras introducidas en el Super Dink 300i ABS. La firma taiwanesa declara haber mejorado las prestaciones de su propulsor en un 10 por ciento gracias al nuevo sistema de inyección Keihin con inyector multiorificio y a un conjunto de transmisión totalmente rediseñado, entre otros pequeños detalles.
El ABS también se ha renovado gracias a que incopora una nueva centralita Bosch de última generación, cuya velocidad de procesamiento es superior a la utilizada en la versión anterior. Estéticamente, la versión ABS ha recibido ciertos retoques para diferenciarla de la básica (que solo incorpora las mejoras en el motor). Estos detalles más lujosos se centran en la decoración de la instrumentación, en la nueva parrilla trasera que incorpora las asas para el pasajero, en las manetas decoradas en negro y en el cosido del tapizado del asiento con hilo rojo. También incluye unos nuevos neumáticos desarrollados específi camente por la firma Kenda, que cuentan con menos dibujo y con más goma en sus laterales.
Prontitud
La rapidez de respuesta al puño del acelerador es una de los aspectos que más llama la atención desde que recorres los primeros metros a los mandos de este maxiscooter. La suavidad con la que progresa la transmisión automática le confiere una buena aceleración y una velocidad máxima generosa, que ronda los 140 km/h.
Desde fuera se aprecia ciertamente voluminoso, pero una vez que te «sientas» dentro de él, la verdad es que parece más compacto. Con 189 kg declarados con el depósito lleno no es un scooter especialmente ligero en parado, pero en marcha los «kilos» desaparecen en gran parte y su tren delantero se siente robusto y aceptáblemente rápido. El agradable tacto general, la buena protección aerodinámica y la gran capacidad del hueco que tiene bajo el asiento son otros aspectos destacables en él.
El ABS ha sido muy mejorado, como pudimos comprobar en la pista deslizante del I.N.T.A. Puedes actuar a tope sobre las dos manetas (no cuenta con frenada combinada) y el sistema de Bosch se encarga de hacer el trabajo. Tú te tienes que limitar a controlar los movimientos que se pueden producir en la dirección y mantener el scooter recto. El retorno que se produce en las manetas es poco perceptible y los neumáticos llegan a bloquear ligeramente, pero lo justo para conseguir una frenada segura.
Se prevé que a finales de junio comience su comercialización a un precio de 4.330 euros (3.880 euros sin ABS). No hay duda que las mejoras recibidas le van a ayudar al Super Dink 300i a mantenerse entre los maxiscooter más vendidos.