Comercializándolas en exclusiva en el mercado de la motocicleta con su firma, Bikers ha desarrollado, junto a Windstopper y de la mano de Polygiene, una completa línea técnica de ropa interior térmica y accesorios diseñados para motociclismo. Esta firma escandinava es líder internacional en soluciones antimicrobiales, en particular aplicadas a todos los ámbitos del deporte de acción, y las prendas térmicas Bikers incorporarán la tecnología «Active Odor Control» que mantiene a raya el olor gracias a su efecto antibacteriano. Así, las prendas Bikers permanecerán totalmente frescas y limpias a lo largo de un uso intensivo que puede prolongarse en actividades de más un día, y que no guardarán olor remanente incluso tras enérgicos lavados...
Las bacterias que causan el mal olor encuentran en la humedad y el calor causado por el sudor en los tejidos que tocan directamente la piel las condiciones perfectas para su desarrollo. Sin embargo, la tecnología Polygiene tiene «efecto antimicrobial» y antialérgico, gracias a incorporar sales o iones de plata de plata que evitan el crecimiento de las bacterias eliminando el mal olor en más de 99% y proporcionando frescura e higiene, siendo además resistentes a más de 50 lavados.
En prueba
A diferencia de las que se comercializarán de serie (top, pantalones, balaclava, calcetines...), Bikers nos proporcionó para realizar la prueba un equipo de preserie de prendas térmicas interiores que contaban con una singular particularidad: sólo empleaban el sistema «fresh in action» en la mitad de su superficie. De este modo, fue sencillo comprobar qué zonas quedaban exentas del inevitable olor corporal producto de la transpiración, incluso después de dos jornadas «haciendo enduro del duro» por las pistas del Memorial Toni Soler disputado en los alrededores de Oliana y Peramola hace apenas unas semanas.
Su excelente diseño anatómico «Bikers-Comfort in Action» creado en 1994 por Aldo Drudi, asegura el máximo ajuste de las prendas. Sus patrones anatómicos y sus costuras planas garantizan el máximo confort, y aíslan definitivamente el cuerpo del motorista de las extremas temperaturas exteriores aumentadas por el efecto Windchill, y crean en torno al cuerpo una cámara de aire que lo aísla del contacto con el exterior y evita su enfriamiento. Las prendas han sido sometidas a pruebas sobre motos de nieve con temperaturas de -30º y a más de 120 km/h en las Montañas Rocosas de Canadá. Las «Fresh in Action» se ha mostrado como una verdadera referencia entre las prendas técnicas de protección térmica –superior 2,5 veces a las fibras polares convencionales–, gracias a su ligereza, poder de transpiración, suavidad de textura, coeficiente hidrófugo, resistencia a la abrasión, durabilidad y, ahora y en exclusiva para Bikers, control de olor por su efecto antibacteriano...