Aleix Espargaró ya se ha subido a la Aprilia RS-GP, y al bajarse se ha mostrado optimista con sus posibilidades para MotoGP 2017: “Muy contento de estar en este equipo. Me han recibido con los brazos abiertos y con mucha ilusión. Eso es algo que me ha impresionado mucho. Todo el equipo está muy esperanzado y han depositado toda la confianza en mí. La moto es un poco más competitiva de lo que esperaba.
Tenía un poco de miedo porque venía de una moto espectacular, pero la moto funciona muy bien y me ha sorprendido lo estable que es, me recuerda a la Yamaha que tuve cuando estaba en Forward. Gira mejor de lo que esperaba pero tenemos que trabajar mucho en la distribución de potencia, sobre todo en aceleración que es dónde más falta potencia. La potencia es nuestro hándicap, pero el chasis me ha gustado mucho, la electrónica es lo mejor de la moto”.
La mejor parte es el margen de mejora: “Hay muchísimo, es solo el primer día. Hemos trabajado sobre todo con goma usada para entender el carácter de la moto. Aprilia tiene un tesoro que no hay que perder, cómo cuida el neumático trasero. Con mi última goma de 31 vueltas me he quedado a sólo tres décimas de mi mejor tiempo. Mañana con neumáticos nuevos se podrá mejorar el tiempo, pero lo importante es mejorar la aceleración. Esto es muy positivo pero a la vez hay que trabajar con neumático nuevo. La moto no acelera mucho y no se puede sacar partido de la goma nueva”.
Ha explicado también que el plan para mañana es “seguir dando vueltas, acumular experiencia y cambiar un poco la potencia para intentar encontrar algo abajo, jugar con la electrónica. De geometrías apenas hemos tocado y lo miraremos mañana”.
Ha tenido la ocasión de subirse a las máquinas de sus dos predecesores: “He probado las de (Álvaro) Bautista y (Stefan) Bradl y son muy distintas una de la otra. Un piloto lleva una posición más baja y estable, pero más difícil de mover; y el otro es bastante más alta y un poco más ágil y yo creo que tenemos que ir en ese dirección. Ganar agilidad. La Aprilia es una moto muy estable, que entras en frenada y no se mueve nada, y lo que tenemos que conseguir es que sea un poquito más ágil”.
Finalmente, no se ha mostrado nada sorprendido por el tiempo de su antiguo compañero, Maverick Viñales: “Cené con él el domingo y sabía que intentaría acabar delante, que se adaptaría bien, pero sinceramente lo de hoy no tiene ningún valor. Se ha rodado muy lento, la pista estaba rara, pero obviamente la calidad del piloto está ahí”.
