Álvaro Bautista viaja a Zambia con Riders for Health

Álvaro Bautista aceptó la invitación de Riders for Health para conocer de primera mano el trabajo de esta organización en el corazón de Zambia. La experiencia ha sido inolvidable.

José G. Maroto Fotos: Andrew Northcott

Álvaro Bautista viaja a Zambia con Riders for Health
Álvaro Bautista viaja a Zambia con Riders for Health

Muchos conocéis el trabajo que hace Riders for Health en el Mundial de MotoGP por las subastas del Día de los Campeones que cada año tienen lugar en Valencia y donde los pilotos donan cascos y demás accesorios para que con el dinero recaudado la organización pueda ampliar sus actividades ayudando a los más necesitados en África.

Estas subastas comenzaron en 1990 en Donington Park, y desde entonces han sido un clásico en el Gran Premio de Gran Bretaña que ahora se disputa en Silverstone. También Laguna Seca se ha convertido en una referencia cada año con su «Day of Champions».

En estos actos es habitual que todos los pilotos muestren su apoyo, pero hasta ahora ninguno se había ofrecido a participar activamente y conocer de primera mano lo que «Riders» está haciendo en África.

El primero ha sido Álvaro Bautista, y el de Talavera no olvidará la experiencia en su vida. «Viajar a Zambia te hace ver que realmente los problemas que tenemos aquí en España o en cualquier país del primer mundo son mínimos comparados con los problemas que tienen allí. Aquí es si ahora me puedo comprar esto, solo puedo tener un coche, no dos… Allí comer es lo que realmente importa, por lo tanto, te das cuenta de que tenemos muchas cosas aquí que nos sobran y que allí sin PlayStation ni nada, son felices», nos contaba Bautista la semana pasada antes de pasar por el quirófano para retirar la tortillería de su lesión en el fémur.

«Es duro porque su vida no es fácil, pero les ves sonrientes y llenos de felicidad. No conocen otras cosas y lo que está claro es que con muy poco pueden ser felices. Allí se ayudan mucho los unos a los otros, son más personas. Aquí prima más el interés, sobre todo el económico, allí no existe el materialismo».

Como no podía ser de otro modo, Álvaro y su chica Noelia, viajaron por Zambia con Randy Mamola, fundador y embajador de la organización quien nos cuenta el porqué se eligió Zambia.

«Allí comenzaremos a actuar más intensivamente en enero. Por el momento solo tenemos 18 motocicletas trabajando en Zambia donde llevamos unos tres años, pero en enero llegarán 76 motos más en la región del sur del país en Livingstone. Esta zona está dividida en ocho distritos y Riders for Health está trabajando en conjunto con la Universidad de Standford desde agosto de este año en un estudio sobre el nivel de salud y asistencia de los ocho distritos de Livingstone. Desde enero vamos a trabajar con motos en cuatro de los ocho distritos y hasta finales de 2013 se hará un estudio para ver las ventajas o desventajas que puede aportar contar con motos en la asistencia médica. La razón de este estudio es porque la Fundación Bill Gates, para dar su apoyo a un proyecto, necesita tener la prueba de que su aportación será aprovechada».

En el grupo, además de Bautista, había más gente de diferentes sectores y empresas, pero todos con la misma pasión: las motos.

«Aparte de toda una estrella de MotoGP como Bautista en este viaje contamos con gente que monta habitualmente en moto, tuvimos a personas que trabajan en campos petrolíferos, en minas, gente de Australia, Estados Unidos, Gran Bretaña que tuvieron la oportunidad de hacer algo con Riders for Health. Eran empresarios de todo el mundo que además de ver lo que hace Riders for Health con sus donaciones, pudieron disfrutar montando en moto por parajes increíbles», continúa Mamola.

«El viaje comenzó en Lusaka, la capital y duró siete días de los cuales, cuatro y medio los pasamos montando en moto e hicimos más de 1.000 km, más del 40 por ciento por caminos de tierra. La gente que hizo el viaje con nosotros tuvo la oportunidad de ver que los que viven allí no están en mitad de la nada. Aunque en muchos sitios de los que estuvimos no haya luz o agua corriente, la gente es feliz con lo poco que tiene».

Y así lo confirma el propio Bautista, que unas semanas después de regresar todavía recordaba lo vivido con una gran sonrisa.

«Están haciendo una gran labor y te das cuenta de que una moto sirve para mucho. Donde hemos estado el acceso a la mayoría de las aldeas son caminos muy poco accesibles, no hay carretera. A través de las motos ayudan a los médicos a llegar más rápidamente a atender a los que lo necesitan. Si con lo medios normales pueden atender a seis aldeas en una semana, con las motos pueden llegar hasta 20. Análisis de sangre para ver si tienen sida, llevan medicamentos, atienden a las embarazadas… En moto tienes una gran facilidad de acceso y en los países de África donde están presentes salvan muchas vidas».

Pero lo que más impresionó al flamante fichaje del equipo San Carlo Honda Gresini fue ver la alegría en la cara de los niños.

«Cuando llegábamos a las aldeas los niños flipaban. Debían pensar: “¿pero esto qué es?”… Les hacías fotos y luego al verlas en la pantalla se quedaban alucinados. Eran felices, para muchos seguro que ese fue el mejor día de su vida, solo por ver pasar 18 motos… Por eso te das cuenta de lo poco que hace falta para ser feliz y que nuestros problemas son tonterías».

Para Randy Mamola ha sido muy importante contar con Bautista en esta experiencia porque: «Para mí no era la primera vez pero en esta última fue muy especial contar con alguien como Álvaro Bautista. Acompañándonos en este viaje Álvaro ha visto que lo que hacemos es algo que realmente funciona bien». Y concluyó diciendo: «Ha sido una gran oportunidad para montar en moto, pero sobre todo para ver lo que realmente necesita la gente en Zambia».