El estreno del carné por puntos en MotoGP

La temporada del estreno del carné por puntos, Dirección de Carrera tuvo que emplearse a fondo. Repasamos todos los incidentes polémicos que sacudieron la categoría reina

Marta Gastón Fotos: Gold&Goose

El estreno del carné por puntos en MotoGP
El estreno del carné por puntos en MotoGP

2013 fue el año en el que Marc Márquez revolucionó la categoría de MotoGP y también el curso en el que se estrenó el famoso carné por puntos. El método sancionador, aprobado por la Grand Prix Commission en diciembre de 2012, llegaba como revulsivo a la actitud antideportiva que la que algunos pilotos habían hecho gala en campañas anteriores. Con su entrada en vigor, los pilotos deberían pensárselo dos veces antes de cometer alguna infracción, pues la acumulación de cuatro puntos significaría arrancar la siguiente carrera desde la última posición de la parrilla de salida; con siete se verían obligado a partir desde el pit lane; y con 10 quedarían excluidos de la próxima prueba. El sistema, en teoría, era bueno; el problema radicaba en saber en qué situaciones era justo aplicarlo y en cuales no. La actuación de Dirección de Carrera durante la temporada generó mucha controversia, especialmente en la categoría reina, donde no fueron pocos los incidentes polémicos que salpicaron la temporada.

El primero de ellos llegaría muy pronto, en la tercera cita de la campaña. Pedrosa venció en Jerez, pero en la rueda de prensa post GP fueron Márquez y Lorenzo quienes acapararon la atención. Una y otra vez, los periodistas trataban de sonsacar declaraciones a los dos españoles sobre el adelantamiento producido en la última curva del último giro, que propició que el balear descendiese a la tercera posición y acabase la prueba muy enfadado, tanto que al bajarse de la moto negó el saludo al ilerdense. Lorenzo no quiso responder a las preguntas, alegando que la situación estaba demasiado reciente y él caliente; Marc, por su parte, evitó la polémica asegurando que no había sido más que un lance de carrera.

Dirección de Carrera compartió la misma opinión que el 93 y optó por no aplicar ningún castigo, pese a que dos semanas más tarde, en Le Mans, Lorenzo pidió públicamente que Márquez fuese sancionado. El mallorquín insistía en que la acción era merecedora de algún tipo de correctivo, pero DdC, con el precedente del adelantamiento Rossi-Gibernau sentenció que aquello no era punible.

Silverstone y las banderas amarillas

El futuro bicampeón del mundo de MotoGP se libró de estrenar su carné por puntos en España, pero en Gran Bretaña no lo logró. Allí, en el entrenamiento matinal de domingo, el de Cervera ignoró las banderas amarillas que señalizaban la caída de Cal Crutchlow y no aminoró la velocidad. La mala suerte quiso que él también se fuese al suelo en ese punto, poniendo en riesgo la seguridad de los comisarios que atendían al británico, así como al propio Crutchlow. La acción le acarreó dos puntos y una luxación en el hombro izquierdo, que no le impidió batirse con Lorenzo en uno de los duelos más apasionantes de la campaña.

Un mes después, un nuevo incidente protagonizado por el genio de Cervera caldeó el ambiente en el paddock. Hablamos del conocido episodio de MotorLand, donde Márquez se tocó con su compañero de equipo, rompiéndole a éste el cable del control de tracción. El contacto entre ambos propició que el 93 se viera obligado a salir unos metros a la escapatoria y que el de Castellar del Vallés enterrara sus opciones de podio y de título, al salir disparado por los aires. Las reacciones no se hicieron esperar. Pedrosa no cargó con demasiada dureza contra su vecino de box, pero si atacó a DdC, a quien acusó en declaraciones a Mediaset de “tomarse las cosas a la ligera" y de “hacer la vista gorda". Lorenzo, por el contrario, recriminó al líder del campeonato que fuera demasiado agresivo y el hecho de que se pusiera en peligro a sí mismo y a los demás. Hasta Stoner dio su opinión sobre el acontecimiento, manifestando que el ilerdense no respetaba a sus rivales.

Márquez, por su parte, alegó que todo había sido producto de la mala suerte y, en realidad, no le faltaba razón. HRC llevaba empleando 15 años el mismo sistema en aquel sensor y nunca había ocurrido nada. Hasta Aragón 2013.

Un punto

Tras la polémica surgida, DdC convocó a una reunión en Sepang a los dos integrantes del Repsol Honda Team. Allí se dirimió que se añadiría un punto al carné de Márquez y no dos como muchos habían pensado. Honda, además, perdía los 25 pts logrados por la victoria de su piloto en Aragón. Pese a que el contacto entre los dos integrantes de la marca del ala dorada fue mucho más leve que el protagonizado por el propio Márquez y Lorenzo en Jerez, esta vez sí se aplicaba una sanción. Mike Webb incluso llegó a admitir en esta entrevista que “el toque fue un lance de carrera normal", pero se impuso el castigo cómo método de advertencia. DdC quería que Marc supiese que llevaba a sus espaldas varios incidentes al límite. 

La sanción no contentó a Lorenzo ni a Pedrosa y en la rueda de prensa oficial, previa al Gran Premio, ambos estallaron. El balear ironizó con la situación, asegurando que deberían haberle añadido un punto más a la clasificación de Marc en lugar de a su carnet. Pedrosa, por su parte, concedió que en MotorLand había tenido mala suerte, pero también dejó caer que su vecino de box llevaba ya demasiadas...

No todo quedó ahí. El domingo, mientras Dani se escapaba, Lorenzo y Márquez se enfrascaron en una lucha por la segunda posición en la que el balear fue más rudo que de costumbre. Fue una especie de “donde las dan las toman", aunque al final Márquez resultó vencedor. DdC no intervino en este caso, como tampoco lo hizo en Australia, donde Márquez y Lorenzo chocaron a la salida del pit lane, ni en el Ricardo Tormo, trazado en el que Pedrosa casi acaba en el suelo tras varios adelantamientos al límite del 99.

Al margen del lío de los tres españoles, Andrea Dovizioso, Héctor Barberá y Andrea Iannone también fueron castigados ese año por sendas acciones antirreglamentarias. Los dos primeros se pasaron de la raya en Assen (el valenciano obstaculizó durante los entrenamientos del sábado al italiano y como respuesta éste le propinó una patada). El segundo Andrea fue amonestado en la República Checa, igualmente, por obstruir a otro piloto en su vuelta rápida. Una temporada completita para Dirección de Carrera, vaya.