Tres puntos separan a Pecco Bagnaia de Miguel Oliveira. Doce son los que hay entre Marco Bezzecchi y Jorge Martín. Con siete carreras por delante en esta temporada 2018, los títulos mundiales de Moto2 y Moto3 parecen ser cosa de cuatro pilotos.
En ambos casos es un duelo entre un italiano y un piloto de la península ibérica. También en ambos casos el duelo es entre una KTM y un piloto cuya marca defiende título (Kalex en Moto2 y Honda en Moto3). Además, los cuatro tienen ya firmado su salto a la categoría siguiente para 2019. Sin embargo, si hay un punto en común entre los cuatro, se encuentra en su pasado: en algún momento, todos ellos llevaron una Mahindra MGP3O en el Campeonato del Mundo de Moto3.
La marca india, que ya hace casi dos años que dijo adiós a la categoría pequeña para centrarse en sus proyectos automovilísticos en la Fórmula E, nunca llegó a estar al nivel de Honda y KTM, las auténticas dominadoras de Moto3 en los últimos años. Sin embargo, durante su estancia tuvo el honor de acoger a un puñado de prometedores pilotos, diamantes que se han ido puliendo hasta pelear por títulos mundiales.
Ya en 2016, el sudafricano Brad Binder se convirtió en el primer campeón del mundo con pasado en Mahindra. Su título llegó sobre la KTM del Red Bull KTM Ajo, pero Binder se había curtido con la máquina de la marca india: fue a finales de 2013, cuando el Ambrogio Racing decidió cambiar Suter Honda por Mahindra para las últimas cinco carreras de la temporada. Allí, en Alemania 2014, Binder lograría su primer podio mundialista.
OLIVEIRA Y BAGNAIA
Renovó para el año siguiente y logró incluso dos podios, antes de cambiar a KTM, donde tras un buen 2015 se destapó con el título de 2016. Sin embargo, el que fuera su compañero en 2015, el portugués Miguel Oliveira, había sido el encargado de darle a Mahindra sus primer podio en Malasia 2013, en su primer año en el equipo oficial de la marca india, donde tenía al español Efrén Vázquez como compañero.
Ahora, Miguel Oliveira pelea por su primer título mundial –en 2015 se le escapó el de Moto3 por los pelos-; y lo hace ante el italiano Pecco Bagnaia. Y si el luso fue el encargado de llevar a Mahindra al cajón, el italiano fue el primero y único que consiguió subir a lo más alto del cajón mundialista con una MGP3O.
Lo hizo dos veces, la primera de ellas en Assen 2016. Un año antes había fichado por el Mapfre Team Mahindra de Jorge Martínez ‘Aspar’, que se había convertido en el equipo oficial de la marca. Dicho de otra forma, relevó a Oliveira como líder de la marca. Tardó poco en lograr su primer podio, pero tendría que pasar más de un año para aquel triunfo, al que seguiría otro en Malasia y, a final de temporada, el salto a Moto2.
MARTÍN Y BEZZECCHI
En sus dos años en Mahindra, Bagnaia tuvo como compañero a Jorge Martín (en 2015 también a Juanfran Guevara). El madrileño desembarcó en el Mundial tras conquistar de forma autoritaria la Red Bull Rookies Cup, y tardó en adaptarse de la KTM a la moto india, con la que en 2016 lograría su primer podio sobre el asfalto mojado de Brno.
Durante esos dos años, un joven piloto italiano hacía cuatro apariciones como mundialista, dos cada año. Ese piloto era Marco Bezzecchi, que por fin en 2017 lograba un contrato a tiempo completo con el CIP… para llevar una Mahindra, claro. Para entonces, Martín ya había fichado por el Gresini Racing y llevaba una Honda, con la que de inmediato dio un salto de calidad que le llevó a pelear con asiduidad por los podios y las victorias.
Un año después, Bezzecchi seguiría sus pasos, pero en otra marca. Igual que el madrileño, Bezzecchi se estrenó en el cajón con Mahindra y en mojado (Japón 2017), e igual que el madrileño, al cambiar de marca –en su caso a KTM con el PrustelGP- dio un salto de calidad inmediato: tan inmediato y tan grande que en su primer año está líder y con serias opciones de título.
Bagnaia, Oliveira, Bezzecchi y Martín. Cuatro pilotos que a priori se jugaran dos títulos mundiales. Todos ellos con pasado en Mahindra, donde tres de ellos (excepto Oliveira) lograron su primer podio.
Cuatro pilotos que, junto a Brad Binder y a otros pilotos que se están estableciendo en el panorama mundialista (Marcel Schrotter, Remy Gardner, Andrea Locatelli, Stefano Manzi, Marcos Ramírez, John McPhee, Andrea Migno, Albert Arenas, Lorenzo Dalla Porta), demuestran que, si bien la Mahindra MGP3O no logró nunca al nivel que ansiaba para pelear por títulos mundiales, sí actúo como una inmejorable pulidora de diamantes, haciendo que algunos de los pilotos que se subieron a ella creciesen hasta el punto de convertirse en candidatos a campeón del mundo con otras marcas.