Aunque la clasificación no refleje una gran mejora (17º en la combinada de los entrenamientos libres del viernes) lo cierto es que Jorge Lorenzo ha acabado satisfecho con el primer día de entrenamientos del GP de Japón. Y no sólo porque el físico ya no sea un problema “ahora me duele un poco, pero en la moto no lo notaba", nos comentaba en rueda de prensa, 1 hora después de los bajarse de su moto.
Jorge Lorenzo podría estar viendo, ahora sí, la luz al final del túnel. “Cuando Fabio Quartararo ha metido el neumático blando ha mejorado un segundo y medio. Yo no he podido dar ese gran salto con neumático nuevo, y sólo he podido mejorar 4 o 5 décimas. Por eso, he terminado en una posición mala, pero en cuanto a ritmo estoy mejor, yo creo que estaría entre los 15 primeros. Más o menos todo el entrenamiento he estado entre 1 segundo y 1.2 del primero, algo que no había conseguido desde el accidente".
Una mejora en el ritmo que tiene una razón, dar un paso atrás para dar dos hacia delante. Volver al chasis que utilizó a principio de año, con el que se sintió mejor, y combinarlo con las mejoras introducidas durante la temporada. El mismo chasis que utilizó hasta la carrera de Le Mans. Desde ese momento, decidió seguir el mismo camino que el del resto de los pilotos de Honda y utilizar una modificación del chasis que estrenaron en el test de Jerez.
Lorenzo escenificó su experiencia con el chasis Honda comparándolo con una manta corta, “cuando tiras de un lado para taparte, te destapas del otro. El chasis iba bien para unas cosas y mal para otras, así que aquí hemos vuelto al chasis antiguo y parece que está yendo mejor que la combinación que teníamos en Tailandia. En la sesión de hoy, cuando los más rápidos me pasaban en pista, he podido mantener su rueda más tiempo".
Jorge Lorenzo ha optado por seguir su propia vía en el desarrollo de su moto y tomar un camino diferente al de Márquez o Crutchlow. Y se ha atrevido a hacerlo porque ya acumula los kilómetros suficientes con la Honda cómo para poder sacar conclusiones por su cuenta. “Ahora con más experiencia con la moto entiendo más cómo actúa este chasis, y para mi estilo es un poco mejor. El principal objetivo ahora será reducir el chatter que tenemos en la frenada".
De aquí a final de año, la solución pasará por poner a punto este chasis, ya que el piloto balear no espera mejoras de Honda de aquí a Valencia. “Supongo que si no traen cosas nuevas es porque de momento no saben encontrar soluciones diferentes, o lo están preparando para más adelante. La realidad ahora es que no hay nada nuevo y nos tenemos que apañar con esto".
