Honda necesita ya la reacción de Jorge Lorenzo

La marca del ala dorada necesita que el balear empiece a conseguir resultados desde ya.

Honda necesita ya la reacción de Jorge Lorenzo
Honda necesita ya la reacción de Jorge Lorenzo

Cuando el** Repsol Honda fichó a Jorge Lorenzo**, entraba dentro de lo previsto que el pentacampeón del mundo tuviese que pasar por una fase inicial de adaptación; y que, por lo tanto, nadie le exigiría estar desde el día uno al nivel de Marc Márquez, perfecto conocedor de la Honda RC213V y campeón de cinco de las seis últimas ediciones de la categoría reina.

Lo que seguramente no esperaban era tanto la duración de esa adaptación como los resultados de Lorenzo durante la misma. Si bien es cierto que las circunstancias no han acompañado –llegó tocado a su primera toma de contacto con la moto en Valencia 2018 y después se lesionó en enero-, ni en el peor de los presagios se esperaría que tras cuatro carreras no hubiese logrado acabar ninguna en el top ten. No lo hubieran imaginado ni Honda ni Lorenzo.

Las opciones de Jorge Lorenzo al título de MotoGP 2019 parecen estar enterradas después de apenas cuatro carreras; y no tanto por los 59 puntos de desventaja que tiene con el líder de la general, su compañero Marc Márquez, sino por las sensaciones transmitidas por el mallorquín tanto sobre la pista como ante los micrófonos.

Después de la carrera de Jerez, donde solamente pudo acabar 12º -y gracias a que un despiste de Pol Espargaró le regaló una posición-, reconoció estar atravesando un momento muy duro psicológicamente. “Soy muy lento entrando en curva", sentenciaba, admitiendo también que el inicio de su aventura en Honda está siendo todavía peor que el que tuvo en Ducati.

Honda necesita ya la reacción de Jorge Lorenzo

Honda necesita ya la reacción de Jorge Lorenzo

La buena noticia es que en Ducati pudo darle la vuelta a la tortilla –aunque en su cuarta carrera (precisamente en Jerez) ya subió al cajón con la Desmosedici-, y que conserva intacta su mentalidad de campeón y su confianza en que llegará a ser muy rápido con Honda, donde todavía dispone de 34 carreras antes del fin de su actual contrato: las 15 restantes de esta temporada y las 19 de 2020.

Ahora bien, es evidente que la intranquilidad va creciendo. La presencia de Marc Márquez en lo más alto de la tabla supone un enorme colchón para Honda, pero si se fichó a Jorge Lorenzo fue, precisamente, para no tener que jugarlo todo a la carta con el número 93.

No solo eso. Es cierto que después de Jerez, Marc Márquez volvió a coger el mando en la clasificación de pilotos y que Honda hizo lo propio en la de constructores, reponiéndose así del fiasco de Austin, donde Marc Márquez se fue de vacío al caerse cuando lideraba –al parecer por algún problema en su moto- y que Honda sumó apenas seis puntos con el décimo puesto de Takaaki Nakagami, su peor registro en décadas. Pero en esas dos clasificaciones basta con un piloto.

El problema llega en la clasificación por equipos. Honda viene de hacer dos tripletes consecutivos en pilotos, constructores y equipos (en 2016 Movistar Yamaha lo dejó en doblete al ganar la de equipos); pero el comienzo de Lorenzo en este 2019 hace que, de momento, marchen terceros en dicha clasificación, donde suman 81 puntos, a 10 del Monster Energy Yamaha y ya a 27 del Mission Winnow Ducati, y con solamente cuatro de ventaja sobre el Team Suzuki Ecstar.

Es evidente que el sueño de Honda es repetir el triplete, y de momento su ‘dream team’ (equipo de ensueño) está fallando, precisamente, en la clasificación de equipos, donde tanto Ducati como Yamaha tienen a dos pilotos asentados en las primeras posiciones. Por eso, Honda necesita que la reacción de Jorge Lorenzo llegue ya.