El LCR Honda Racing Team ha vuelto a dividir en dos la presentación de sus Honda RC213V para la temporada 2023 del Campeonato del Mundo, una para cada patrocinador principal: primero la del español Álex Rins con Castrol y, una hora después, la del japonés Takaaki Nakagami con Idemitsu.
La del LCR, que mantiene la esencia de sus colores de los últimos años, es ya la antepenúltima de las presentaciones de los equipos de la categoría reina, que encaran ya el tramo final de la pretemporada 2023 de MotoGP rumbo a Portimao, donde se celebrarán los últimos test y el primer GP del curso.
TODAS LAS FOTOS DE LA HONDA RC213V CASTROL/IDEMITSU MOTOGP 2023
Un año más, el LCR cuenta con dos decoraciones totalmente distintas.
TODO TIPO DE SUEÑOS
El LCR es el sueño de Lucio Cecchinello. Ahí estuvo el principio. Cuando todavía era piloto, decidió crear el Lucio Cecchinello para ser su propio jefe en 125cc. Primero él solo, después con Nobby Ueda de compañero y más tarde con otros pilotos y después sin él en pista.
Desde entonces, esa semilla ha crecido y ahora es uno de los equipos más estables de MotoGP, donde permanece como la única estructura con un patrocinador principal distinto a cada lado del box. A la sección Castrol llega Álex Rins para tomar el relevo de Álex Márquez y Cal Crutchlow, heredando el material oficial de Honda Racing Corporation.
Al otro lado, la vertiente japonesa de Idemitsu con Takaaki Nakagami un año más a los mandos después de la renuncia de Ai Ogura de subir tan pronto a la clase reina. Patrocinadores distintos y objetivos distintos que nacen de sueños distintos. De ahí que el eslogan de la presentación sea 'All Kind of Dreams': todo tipo de sueños.
Con ese leitmotiv han realizado una presentación realmente especial, donde Rins y Nakagami se convierten en los protagonistas de su propio cortometraje; durmiéndose antes de sus respectivas presentaciones y dejando que el mundo de los sueños eche a volar su imaginación: Álex viaja por el espacio y se convierte en mecánico, mientras que Taka viaja en el tiempo hasta 1953.
RINS, EL SUEÑO DEL TÍTULO
“Mi sueño ahora mismo es ser campeón del mundo. Trabajo y lucho mucho para serlo. Para llegar a ser campeón del mundo tienes que trabajar mucho, estar con buenos profesionales, que luchar en tu trabajo, en tu casa, con tu familia: tienes que tenerlo todo bajo control", apunta Álex Rins, que llega tras seis años con Suzuki, donde se ha vuelto un piloto mucho más completo:
"Va a ser mi séptima temporada en MotoGP y todos los años aprendo algo nuevo. En estos años he aprendido a trabajar bajo presión, a estar tranquilo cuando hay mucha presión y mucha velocidad en pista. Sobre todo en los últimos años he dado un gran paso en mi mentalidad a la hora de estar tranquilo y gestionar diferentes situaciones", prosigue el piloto de 27 años, que llegó a ser tercero en MotoGP 2023.
"Al Álex de hace 15 años le diría que trabaje duro, que sea feliz, que encuentre buenas personas de las que rodearse. Si tienes todo esto y trabajas duro, llegarás", reflexiona el catalán, que hasta la fecha suma 5 victorias y 17 podios en MotoGP, unos números que espera aumentar en esta aventura con Honda:
"Mi punto más fuerte como piloto puede ser la constancia. Trato de trabajar duro desde el inicio de cada GP el viernes, intentando estudiar y aprender el circuito, las notas del año anterior, estar con mis ingenieros tratando de entender la moto y conocer más o menos todos los secretos de esa pista. Empezaré 2023 con trabajo y determinación, trabajando con mi moto para tener un buen potencial", concluye el 7º clasificado de 2022.
NAKAGAMI, LUCHAR POR UN SUEÑO
"Mis primeros sueños vienen de cuando tenía 9 años, fui al GP de Japón en Motegi y conocí por primera vez a mi ídolo, Daijiro Kato. Fue la primera vez que le conocí y, a la vez, me dio sus botas, que todavía tengo en casa. Tras aquello me di cuenta de que algún día quería ser como él, sigue siendo mi gran ídolo. Siento que ese hombre y ese deporte siguen siendo algo muy especial. Fue mi primer sueño de carreras", rememora Takaaki Nakagami, único piloto nipón en clase reina.
"Lo bueno de mi equipo es que son siempre profesionales, que no cometen errores y que somos como parte de una gran familia. Me ayudan mucho durante el fin de semana de carreras y no solo en pista. Somos muy cercanos y eso me hace sentir una parte de la familia del equipo de carreras. Han hecho un trabajo increíble en los últimos años", admite 'Taka', que lleva cinco años en el equipo con un 10º puesto final en 2020.
"Mi objetivo para 2023 es ser competitivo. Tenemos un formato diferente de fin de semana con las carreras sprint, así que serán 21 + 21 carreras, un total de 42. Va a ser duro, vamos a estar muy ocupados, pero estamos preparados para ser competitivos y luchar, y espero que podamos ponerlo todo junto para el fin de semana y la temporada. Espero que tengamos una gran temporada", confía el piloto de 31 años, uno de los más veteranos de la parrilla y que busca su primer podio en MotoGP.
