Por primera vez hemos visto a Jorge Lorenzo de “rosso” Ducati (recuerda que en Valencia fue de riguroso negro). Las diferencias entre aquel test y este primer día de entrenamientos en Malasia han ido más allá de los colores de la moto, y es que si en el Ricardo Tormo parecía que la adaptación a la Ducati iba sobre ruedas, aquí en Sepang el piloto mallorquín ha comprobado que la moto italiana poco tiene que ver con su antigua Yamaha.
“Probablemente, entre las cuatro o cinco motos que hay en estos momentos en MotoGP, la Ducati y la Yamaha son las más opuestas a la hora de pilotar. Esto crea una dificultad lógica, después de nueve años llevando siempre la misma moto. Pero siempre recuerdo que en el pasado no he sido un piloto que rápidamente he entendido los cambios, pero cuando los he entendido lo he mantenido siempre. La cuestión es entenderlo poco a poco y ya saldrá natural en todas las pistas”.
Según ha explicado Jorge Lorenzo, la Ducati que probó en Valencia era la misma con la que ha empezado a trabajar en Sepang. Aunque, obviamente, las características de la pista hayan afectado a su ‘feeling’ con la moto. “Sepang es un circuito de stop&go y frenadas fuertes, los tiempos no salían pilotando como en Valencia. Y he tenido que entender poco a poco cómo hacerlo viendo la telemetría de Andrea Dovizioso y escuchando a Michele Pirro con su experiencia con Ducati. Tengo que hacer más trabajo yo como piloto para adaptarme a la Ducati, que adaptar la moto a mi estilo, que era lo que pensaba. Es evidente que hay que seguir mejorando los puntos fuertes de la moto, pero el trabajo mayor va a ser acercarme al pilotaje ideal de la moto”.
También ha confesado Jorge Lorenzo que este primer día de entrenamientos ha sido más difícil de lo esperado. “La Ducati se pilota muy diferente de la moto que he llevado los últimos nueve años. La Yamaha se pilotaba diferente, se frenaba antes y se hacía más paso por curva. Esto ha sido una sorpresa para mí porque en Valencia, rápidamente con mi estilo fui fuerte desde el principio pero en esta pista, no es así. La moto era la misma que había probado en Valencia, exactamente igual. He estado probando un poco la ergonomía para hacerla un poco más a mi estilo y que me sienta más cómodo porque me canso mucho. Evidentemente, tenemos mucho trabajo, más de lo que esperaba”.
Aunque Jorge Lorenzo está confiado en adaptándose a la Ducati, podrá sacar partido a su peculiar estilo de pilotaje. “Aunque la Ducati no te permita tanto paso por curva como la Yamaha, mi paso por curva seguirá siendo rápido, siempre iré más rápido que los pilotos que no tienen paso por curva. Pero sí que es cierto que con esta moto tienes que frenar más tarde y entrar en la curva con el freno, que es el estilo que está haciendo Dovizioso hoy en día. Este estilo se aleja mucho al que empecé esta mañana, pero poco a poco lo he entendido para mejorar los tiempos”.
Según avanzaba el día, esa mejora en los tiempos ha sido evidente con respecto a la primera hora de la mañana, y Jorge Lorenzo se ha mostrado optimista. “Hemos empezado a 3 segundos del más rápido y he terminado a 1.5. Hemos visto que todas las Ducati van fuerte aquí. Que pilotos como Bautista, con una moto no oficial, y que las dos oficiales estén delante deja claro que la moto tiene potencial cuando sabes exprimirla al máximo”.