Mismos colores, mismos pilotos. Los cambios en la presentación del Red Bull KTM Factory Racing apenas van más allá del dígito que cambia entre 2021 y 2022: solamente la llegada de Francesco Guidotti para ponerse al frente de la estructura oficial de la marca austriaca varía el paisaje del box en el que repetirán el sudafricano Brad Binder y el portugués Miguel Oliveira para tratar de salir del estancamiento del pasado curso y retomar la progresión ascendente de la KTM RC16.
OBJETIVO: PODIO FINAL
“2021 fue la temporada más exitosa de nuestro grupo en los deportes de motor”, comienza diciendo Pit Beirer, Director de KTM Motorsport. “Es increíble lo que hemos hecho en un año en el paddock mundialista: ganar el título mundial de Moto3, ganar el título mundial de Moto2 y terminar sextos en MotoGP”, enumera.
“Es súper motivador para todo en el futuro. Cuando empiezas un proyecto como este en MotoGP quieres ganar una carrera algún día, y decirlo parece fácil, pero hacerlo requiere un esfuerzo increíble con mucha gente implicada. Lo hicimos”, se jacta el alemán, que también mira el otro lado del tablero:
“También tuvimos que aprender el lado duro, ganas un fin de semana, pero el siguiente estás luchando para meterte en Q2 porque está muy apretado. Nuestro objetivo ahora estar ahí de forma consistente cada fin de semana, meternos en el top 5 y luchar por el podio en la general final. Ese tiene que ser el objetivo de la temporada. Sé que es muy alto porque los demás fabricantes también tienen objetivos ambiciosos, pero somos fuertes: tenemos el equipo, la base, la moto y los pilotos”, culmina.
“Siempre es importante hacerlo mejor que el año anterior”, postula Francesco Guidotti, que hereda el cargo de Team Manager del Red Bull KTM Factory Racing que hasta ahora ocupaba Mike Leitner. “Para hacerlo mejor necesitamos resultados consistentes, estar de forma más constante en el top 5 y en el podio. hemos desarrollado la moto para que los pilotos estén felices, para darles el feeling correcto y la confianza para lograr esos resultados”, razona el italiano, que llega desde el Pramac Racing.
“Por supuesto, su posición es importante porque tienen que mostrar el potencial de la moto y el proyecto. Tienen 2-3 años de experiencia en la categoría, así que es el momento de usar esa experiencia. Han ganado carreras, así que la habilidad y el potencial están ahí, así que tenemos que verlo más regularmente. En los últimos cinco años los resultados han sido increíbles. Es increíble lo que ha hecho KTM partiendo de cero y queremos seguir adelante”, dictamina.
BINDER, LECCIÓN APRENDIDA
“He aprendido tantas cosas en las dos últimas temporadas que es difícil escoger un par en particular”, reflexiona Brad Binder, que encara su tercer curso en MotoGP, siempre en las filas del Red Bull KTM Factory Racing. “Creo que cada año ha tenido sus propios retos: en el primero tuve que gestionar un poco mis expectativas. A menudo quería conseguir demasiado y demasiado pronto y cometí muchos errores”, admite el sudafricano, que también repasa el complicado 2021 de la marca austriaca:
“El año pasado tuve que aceptar dónde estábamos en algunos puntos e intentar llevar la moto de vuelta a casa, lo cual fue difícil pero aprendí mucho: aprendí mucho sobre la categoría, sobre cómo conservar mejor mis neumáticos, como gestionar las carreras y en realidad lo disfruté mucho”, asegura el piloto de 26 años, que terminó sexto en la general.
“Por lo tanto, voy a por mi tercera temporada entendiendo qué es lo que necesito para ser más rápido, y estoy deseando que empiece el año. Estoy más preparado que nunca”, sentencia el de Potchefstroom, que ha conseguido una victoria en cada una de sus temporadas en la categoría reina.
OLIVEIRA, AUTOCRÍTICO
“El año pasado dimos un gran paso hacia delante en cuatro carreras, en las que conseguí tres podios y una victoria, lo cual estuvo bastante bien”, recuerda el portugués Miguel Oliveira, cuyo 2021 fue una auténtica montaña rusa de sensaciones y resultados, sobre todo a raíz de los problemas físicos que sufrió durante el curso:
“Después, con la lesión en la segunda parte de la temporada las carreras se volvieron muy duras, en lo que definitivamente fue una curva de aprendizaje para mí. Me faltó consistencia y evidentemente este año quiero mejorar esto. Nunca es fácil ir al límite y seguir pensando en terminar la carrera”, razona el luso, que a sus 27 años encara su cuarto curso en la élite con KTM, el segundo en la estructura oficial tras dos temporadas en el Tech3.
“Diría que si soy capaz de sumar puntos en todos los grandes premios, el resultado al final del campeonato sería bastante diferente, así que simplemente estamos buscando cómo extraer el máximo potencial de mí mismo, de la moto y de todo el equipo para traducir todo eso en resultados”, asevera el de Almada, ganador de tres carreras en MotoGP: dos en 2020 y una en 2021.
