El nuevo reglamento de MotoGP permite "ruedecillas" traseras [inocentada]

Aunque ha pasado desapercibido, el nuevo reglamento de MotoGP para 2018 ha sufrido pequeños cambios muy interesantes.

Carlos Domínguez

El nuevo reglamento de MotoGP permite "ruedecillas" traseras [inocentada]
El nuevo reglamento de MotoGP permite "ruedecillas" traseras [inocentada]

Tener bajo control el reglamento de MotoGP no es tarea fácil. La FIM lo actualiza casi de forma constante para introducir cambios radicales, por ejemplo el año en el que se estrenaban las máquinas de cuatro tiempos, como otros mucho más sutiles y que hay que leer con mucha atención para interpretar de la mejor manera. Entre estos, por ejemplo, podemos hablar de lo relativo a los alerones de los carenados. Para 2018, FIM ha introducido un cambio que seguro dará mucho de que hablar. Ha llegado escondido con tecnicismos pero en el punto 2.4.4.4.1 sobre en lo relativo a suspensiones y amortiguaciones se puede leer lo siguiente:

Electric/electronic controlled suspension, ride height and steering damper systems are not allowed. Adjustments to the suspension and steering damper systems may be made by manual human inputs and/or mechanical/ hydraulic adjusters, including the use of extra supporting points (with a maximum of two) at the rear end. In this case, machine must not use any kind of traction control or anti-wheelie.

En otras palabras, además de la obviedad de no poder utilizar suspensiones electrónicas, que queda intacto, lo que sí se podrá utilizar serán nuevos puntos de apoyo en el eje trasero, siempre y cuando renuncien al control de tracción y al antiwheelie. Esto, traducido al castellano, significa que cada fabricante es ahora libre de montar un sistema de control tracción y anti-wheelie mecánico que, en principio, iría anclado al basculante. El mecanismo no es en absoluto nuevo, y según fotos espía a las que hemos tenido acceso en MOTOCICLISMO tendría una estructura similar a la que se ven en algunas motos "drag race", o carreras en recta, aunque mucho más avanzado.

La decisión podría llegar propiciada por la presión de la afición que, desde hace años, pide que la electrónica tenga cada vez menos protagonismo en las carreras. Renunciar al agarre en pista significaría correr más riesgos (algo a lo que Dorna no está dispuesta) pero parecen haber encontrado la forma de garantizar la seguridad de los pilotos y el espectáculo para la audiencia. Con este sistema de dos puntos extra de apoyo una moto podría hacerse el circuito de Ricardo Tormo entero derrapando sin miedo a salir por orejas o pasar hacer la recta de meta a una rueda sin miedo a caer.

Las principales marcas están ya desarrollando sus propios dispositivos que podremos ver a todas luces en los próximos tests. La pregunta es ahora si esos nuevos puntos de apoyo tendrán que estar también cubiertos por el carenado de la moto para evitar que se produzcan accidentes al engancharse durante adelantamientos. De momento, en el circuito de pruebas de Honda están realizando las pruebas sin ningún tipo de cubierta.